El Bosque Encantado
En un hermoso bosque encantado vivían muchas hadas, cada una con un vestido rojo que les otorgaba un brillo especial. Sin embargo, un día llegó una bruja malvada llamada Morgana, quien odiaba el color rojo y comenzó a perseguir a todas las hadas para arrebatarles sus vestidos. Las hadas, asustadas, se escondieron en lo más profundo del bosque, pero Morgana no paraba de buscarlas. Ante esta situación, las hadas decidieron buscar ayuda. -
- ¿Qué haremos? ¡Morgana no nos da tregua! - exclamó Azalea, una de las hadas más valientes. -
Esmeralda, la sabia hada mayor, tomó la palabra: - Debemos encontrar la Fuente de la Sabiduría, donde vive la Sabia Madre del Bosque. Ella nos dará la solución. Las hadas emprendieron entonces un viaje a través del bosque, esquivando los peligros y ocultándose de Morgana. Después de un largo camino, finalmente encontraron la Fuente de la Sabiduría. La Sabia Madre del Bosque, con amor en sus ojos, escuchó el relato de las hadas y les dio un consejo: -
Queridas hadas, el poder de la luz y el amor siempre vencerá a la oscuridad. No teman, cada una de ustedes tiene una luz especial que Morgana no puede apagar. Vuelvan al bosque y unan sus corazones en un círculo mágico. Morgana no podrá resistir la luz y será vencida. Las hadas, fortalecidas por las palabras de la Sabia Madre, regresaron al bosque y formaron un círculo uniendo sus manos. Sus corazones brillaron intensamente y una luz cálida y brillante se expandió por todo el bosque. Morgana, al ver la luz, se sintió abrumada y, en lugar de combatirla, sintió el amor y la calidez que emanaba de las hadas. La bruja mala se transformó en una dulce anciana y pidió perdón por su comportamiento. Las hadas, conmovidas, la abrazaron y le dieron la bienvenida al círculo mágico. Desde entonces, Morgana se convirtió en la protectora del bosque y las hadas vivieron en armonía, enseñándole a la antigua bruja el valor de la amistad y el amor. El bosque encantado se llenó de colores y alegría, mostrando que el amor y la unión son más fuertes que cualquier oscuridad.
FIN.