El bosque encantado
En un hermoso bosque, en el corazón de la Patagonia, vivía una comunidad de plantas felices y coloridas.
Todos los días, las plantas se mecían suavemente al compás del viento, disfrutando del cálido sol y del fresco rocío de la mañana. Sin embargo, un día, un grupo de leñadores llegó al bosque con la intención de talar árboles para construir nuevas casas. Las plantas se sintieron tristes al ver cómo su hogar estaba en peligro.
"¡Oh no! ¡Están destruyendo nuestro hogar!" -exclamó Margarita, la flor más alegre del bosque. Las plantas se reunieron para buscar una solución, pero no sabían qué hacer. Fue entonces cuando la sabia abuela Sauce les habló. "Mis queridas plantas, no debemos perder la esperanza.
Si unimos nuestras fuerzas y encontramos una manera de demostrar la belleza y el valor de nuestro bosque, tal vez podamos salvarlo". Animadas por las palabras de la abuela Sauce, las plantas idearon un plan.
Decidieron organizar un festival de colores para mostrar la diversidad y la magia del bosque. Invitaron a animales, hadas y duendes a unirse al festival e hicieron carteles para difundirlo por todo el bosque.
El día del festival, el bosque se llenó de alegría, música y colores. Las plantas lucían sus flores más brillantes y sus hojas más verdes, mientras los animales mostraban sus trucos y bailes. La gente del pueblo, asombrada por tanta belleza, decidió unirse al festival y apoyar la conservación del bosque.
Al final del día, los leñadores, conmovidos por la magia y la importancia del bosque, decidieron abandonar sus planes de tala y prometieron protegerlo para siempre.
Las plantas, felices y aliviadas, agradecieron a todos los que habían ayudado a salvar su hogar. A partir de ese día, el bosque encantado se convirtió en un lugar protegido y lleno de vida, donde todas las plantas podían crecer y florecer en paz.
FIN.