El Bosque Salvado
Había una vez en el hermoso bosque de la Patagonia, una pequeña y valiente niña llamada Caperucita. Era conocida por su cabello rojo como el fuego y su espíritu aventurero.
Un día, mientras caminaba por el sendero del bosque, se encontró con un lobo muy peculiar. No era un lobo feroz y amenazante, sino uno amigable y curioso. Este lobo se llamaba Dante.
Dante llevaba siempre puesto un par de zapatos mágicos que le permitían hablar con los animales del bosque. Gracias a esto, tenía muchos amigos entre ellos. Caperucita quedó asombrada al ver a Dante hablando con los pájaros y conejos que saltaban a su alrededor.
Fascinada por este encuentro inesperado, decidió entablar una conversación:"¡Hola! ¿Quién eres tú?" -preguntó Caperucita emocionada. "¡Hola! Soy Dante, el lobo amigable. ¿Y tú?""Soy Caperucita Roja", respondió ella sonriendo. A partir de ese momento, Caperucita y Dante se volvieron inseparables amigos.
Juntos exploraron cada rincón del bosque, descubriendo criaturas mágicas y aprendiendo lecciones importantes sobre el cuidado de la naturaleza. Un día, recibieron noticias tristes: la abuela de Caperucita había enfermado y necesitaba ayuda urgentemente.
Sin pensarlo dos veces, nuestros valientes amigos decidieron emprender un viaje para llevarle medicina a la abuela enferma. En su camino hacia la casa de la abuela, Caperucita y Dante se encontraron con un zapato perdido en el camino.
Este zapato era mágico y tenía la capacidad de guiarlos hacia su destino. "¡Mira, Dante! ¡Este zapato nos ayudará a encontrar el camino más rápido hacia la casa de mi abuela!" -exclamó Caperucita emocionada.
Siguiendo las indicaciones del zapato, Caperucita y Dante llegaron rápidamente a la casa de la abuela. Al entrar, se llevaron una gran sorpresa: en lugar de estar enferma, la abuela estaba llena de energía y vitalidad.
Resulta que había sido una trampa del malvado lobo Grisú, quien quería apoderarse del bosque y alejar a todos sus habitantes. Pero gracias a los poderes especiales del zapato mágico, Caperucita pudo descubrir su plan malévolo. Con valentía y astucia, nuestros amigos lograron derrotar al lobo Grisú y salvar el bosque.
Todos los animales celebraron con alegría el final feliz de esta aventura. A partir de ese día, Caperucita siguió explorando junto a Dante y aprendiendo sobre la importancia de cuidar el medio ambiente.
Juntos enseñaban a otros niños sobre cómo proteger los recursos naturales y vivir en armonía con la naturaleza.
Y así fue como Caperucita Roja, el lobo amigable Dante, el zapato mágico y todos los animales del bosque vivieron felices para siempre mientras compartían su amor por la naturaleza y las aventuras que les esperaban cada día.
FIN.