El brillo de Helios y Selene




En la antigüedad, en las altas cumbres del Olimpo, vivían Hiperión y Thea, quienes tenían dos hijos, Helios y Selene. Helios era un joven de largos cabellos dorados y cuerpo esbelto, rebosante de felicidad, lo que despertaba la envidia en sus tíos, los temibles titanes. Por otro lado, Selene, su hermana melliza, poseía una belleza serena y una mirada llena de misterio.

Un día, cansados de la hostilidad de los titanes, Hiperión y Thea decidieron enviar a sus hijos a un lugar seguro lejos del Olimpo. Les confiaron a Eos, la diosa del amanecer, quien los llevó a vivir a la Tierra. Allí, Helios y Selene descubrieron un mundo nuevo, lleno de vida y diversidad.

Pronto, se dieron cuenta de que podían aportar algo maravilloso a la Tierra. Helios descubrió que su luz dorada podía alegrar a las personas y hacer crecer las plantas, mientras que Selene comprendió que su serenidad podía traer paz y calma a los corazones afligidos. Juntos, decidieron ayudar a los seres humanos a cultivar la armonía en sus vidas.

Mientras tanto, en el Olimpo, los titanes se dieron cuenta de que su odio hacia Helios y Selene les había quitado la oportunidad de disfrutar de la verdadera belleza de la vida. Arrepentidos, buscaron una forma de reparar el daño causado. Decidieron emprender un viaje a la Tierra para pedir perdón a sus sobrinos.

Al llegar, los titanes se encontraron con Helios y Selene, quienes los recibieron con amor y sin rencor. Los titanes, impresionados por la bondad y sabiduría de sus sobrinos, les pidieron perdón y les solicitaron ayuda para aprender a apreciar la belleza de la vida.

Con paciencia, Helios y Selene les enseñaron a los titanes sobre la importancia de la armonía, la solidaridad y el amor. Poco a poco, los corazones de los titanes se ablandaron, y descubrieron la alegría de ver la vida con los ojos del amor.

Desde ese día, Helios y Selene, junto con los titanes, se convirtieron en guardianes de la armonía en la Tierra y el Olimpo, llevando luz y serenidad a todos los rincones del mundo.

FIN.

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