El cambio de Renzo



Había una vez en un bosque encantado, donde vivían diferentes animales que se llevaban muy bien entre sí.

Había conejos juguetones, pájaros cantarines, ardillas traviesas y muchos otros seres mágicos que disfrutaban de la armonía y la alegría de vivir juntos en comunidad. Un día, llegó al bosque un zorrito llamado Renzo. Renzo era muy astuto y simpático, pero también un poco egoísta.

No le gustaba compartir con los demás animales y prefería hacer las cosas por su cuenta. Al principio, los demás animales intentaron acercarse a Renzo y hacerlo sentir parte de la comunidad. Pero el zorrito siempre encontraba una excusa para alejarse y estar solo.

Pasaba sus días cazando solito y guardando sus alimentos en su madriguera sin preocuparse por nadie más. Un día, una fuerte tormenta azotó el bosque.

Los árboles temblaban, los ríos se desbordaban y todos los animales tuvieron que refugiarse juntos en una cueva para protegerse del mal tiempo. "¡Ayuda! ¡Mi madriguera se está inundando!" -gritó Renzo desesperado al ver cómo el agua entraba rápidamente en su hogar. Los demás animales se miraron entre sí, sabiendo que tenían que actuar rápido para salvar a Renzo.

Trabajaron juntos para construir un dique improvisado que detuviera el agua y rescataron al zorrito justo a tiempo. "¡Gracias chicos! No merecía tanta ayuda después de haber sido tan egoísta" -dijo Renzo avergonzado mientras lágrimas de gratitud brotaban de sus ojos.

A partir de ese día, Renzo entendió la importancia de vivir en comunidad. Aprendió a compartir con los demás animales, a colaborar en equipo y a valorar la amistad por sobre todas las cosas.

Con el paso del tiempo, Renzo se convirtió en uno de los miembros más queridos del bosque encantado. Organizaba juegos para todos los animales, ayudaba en las tareas cotidianas y nunca más volvió a sentirse solo o apartado.

Y así, gracias a la solidaridad y el compañerismo de la comunidad, cada animal del bosque comprendió que juntos podían superar cualquier adversidad y vivir felices para siempre en armonía y paz.

FIN.

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