El camino de la amistad
En una escuela muy especial, había tres amigos llamados Brayan, Fran y Lesly. Ellos solían pasar el recreo juntos, reían, compartían y disfrutaban de la amistad. Sin embargo, un día algo cambió. Brayan y Fran se juntaron con otros chicos de la escuela que no obedecían las reglas, faltaban el respeto a los maestros y no se preocupaban por estudiar. Lesly, por su parte, decidió no seguirles el juego, ella prefería pasar el tiempo con amigos que compartieran sus valores y respetaran las normas de convivencia.
Las semanas pasaron y Brayan y Fran, influenciados por sus nuevos amigos, comenzaron a portarse mal en clase. No prestaban atención, interrumpían las clases y no hacían sus tareas. Lesly, por otro lado, seguía esforzándose por ser una buena estudiante, ayudando a sus compañeros y siendo respetuosa con sus maestros.
Un día, la directora de la escuela se enteró de la conducta inapropiada de Brayan y Fran. Convocó a los tres amigos a su oficina y les explicó lo decepcionada que estaba por la actitud de Brayan y Fran. Lesly, por otro lado, recibió halagos por su comportamiento ejemplar. La directora decidió dar un castigo a Brayan y Fran, pero también les dio una oportunidad para rectificar su comportamiento. Les recordó lo importante que es elegir bien a nuestros amigos y el valor de mantenerse firme en nuestros principios.
Tras el castigo, Brayan y Fran se dieron cuenta del error que habían cometido. Lesly les demostró su amistad incondicional al apoyarlos y alentarlos a enmendar su conducta. Juntos, los tres amigos decidieron retomar el camino de la amistad verdadera, basada en el respeto, la responsabilidad y la solidaridad. A partir de ese momento, Brayan y Fran se comprometieron a seguir el ejemplo de Lesly y a ser mejores estudiantes y amigos.
La amistad entre Brayan, Fran y Lesly se fortaleció aún más, demostrando que, a pesar de los errores, el cariño y la comprensión pueden ayudarnos a superar cualquier obstáculo en el camino de la vida.
Fin
FIN.