El camino de la bondad
Había una vez un niño llamado Mateo, de 9 años, que vivía en un pequeño pueblo rodeado de montañas. Era un niño alegre y curioso, siempre dispuesto a explorar el mundo que lo rodeaba.
Un día, mientras Mateo jugaba en el parque del pueblo, algo extraordinario sucedió. Un ángel y un demonio aparecieron frente a él.
El ángel era alto y radiante, con alas blancas como la nieve; mientras que el demonio era pequeño y oscuro, con ojos rojos brillantes. El ángel se acercó a Mateo con una sonrisa cálida en su rostro. "Hola, Mateo. Soy Ángela, tu protectora celestial", dijo con dulzura. El demonio gruñó desde detrás del ángel.
"Y yo soy Dante, tu compañero infernal", dijo con voz siniestra. Mateo miró asombrado a ambos personajes que habían aparecido repentinamente frente a él. No sabía qué hacer ni qué pensar.
Ángela explicó: "Mateo, tanto Dante como yo estamos aquí para ayudarte a tomar decisiones en tu vida". Dante interrumpió rápidamente: "Pero cada uno tiene su propio punto de vista sobre cómo debes vivir".
Mateo se rascó la cabeza confundido y preguntó: "¿Por qué ustedes dos quieren decidir por mí?"Ángela sonrió amablemente: "Porque creemos en ti y queremos guiarte hacia el camino correcto". Dante respondió maliciosamente: "¡Yo solo quiero divertirme contigo! ¡Hacer travesuras y romper las reglas!"Mateo pensó profundamente en lo que ambos le habían dicho.
Sabía que tenía que tomar una decisión importante, pero no sabía cuál era la correcta. Decidió dar un paseo por el bosque cercano para aclarar su mente. Mientras caminaba entre los árboles, escuchó un susurro proveniente de un arbusto.
"-Mateo, aquí abajo", dijo una pequeña voz. Mateo se agachó y descubrió a una mariposa parlante llamada Margarita. "Hola, Mateo. Soy Margarita, la guardiana de la sabiduría", dijo con delicadeza.
Sorprendido por esta nueva aparición mágica, Mateo preguntó: "¿Puedes ayudarme a decidir qué hacer?"Margarita asintió y explicó: "Elige el camino que te haga sentir bien contigo mismo y con los demás. Sigue tu corazón y tus valores".
Con estas palabras en mente, Mateo volvió al parque donde estaban Ángela y Dante esperándolo impacientes. Ángela miraba con ternura mientras Dante jugueteaba con fuego en sus manos. "Entonces, ¿has tomado tu decisión?", preguntó Ángela ansiosa. Mateo sonrió confiadamente. "-Sí, he decidido seguir mi propio camino.
"Dante se rió maliciosamente: "¡Excelente! ¡Vamos a hacer travesuras juntos!"Pero Mateo negó con la cabeza: "-No Dante, eso no es lo correcto". Ángela sonrió orgullosa mientras Dante fruncía el ceño confundido. "-He decidido ser amable y ayudar a los demás.
Quiero hacer el bien en el mundo", dijo Mateo con convicción. Dante bufó de desagrado, pero Ángela envolvió a Mateo en un abrazo reconfortante. "-Estoy muy orgullosa de ti, Mateo. Juntos podemos marcar la diferencia".
Y así comenzó una nueva aventura para Mateo, rodeado de bondad y luz. Aprendió que cada uno tiene una elección y que es importante escuchar su propio corazón para tomar decisiones sabias.
Desde aquel día, Mateo se convirtió en un niño valiente y generoso que inspiraba a todos los que lo conocían. Y aunque Ángela y Dante siguieron apareciendo ocasionalmente en su vida, siempre recordaban respetar su libre albedrío y apoyarlo en sus decisiones.
Y así, con el tiempo, Mateo se convirtió en un adulto ejemplar que demostraba al mundo lo hermosa que puede ser la bondad cuando se elige como camino de vida.
FIN.