El Camino del Éxito



Juan era un niño muy entusiasta y siempre había soñado con ser un gran jugador de fútbol. Sin embargo, a pesar de su amor por el deporte, no parecía tener mucho talento para jugarlo.

Cada vez que Juan se unía a algún partido en la calle o en la escuela, terminaba siendo el último elegido para formar parte del equipo.

Los otros niños le decían cosas como: "¿Por qué juegas si eres tan malo?" o "No sirves para nada en el campo". Juan se sentía triste y desanimado por esas palabras, pero nunca dejó de intentarlo.

Un día, mientras caminaba por la plaza del barrio, vio a unos niños jugando al fútbol y se acercó a verlos. - Hola chicos ¿puedo jugar con ustedes? - preguntó tímidamente. - No gracias - respondió uno de los niños sin mirarlo siquiera - ya estamos completos. Pero Juan no se rindió fácilmente.

Se quedó allí observando cómo jugaban y practicando algunos movimientos. Al cabo de unos minutos, uno de los jugadores salió lastimado y tuvieron que parar el juego. - ¿Necesitan otro jugador? - dijo Juan acercándose nuevamente. Esta vez los chicos accedieron a dejarlo jugar.

Aunque al principio cometió varios errores e incluso hizo goles en contra de su propio equipo, poco a poco fue mejorando su técnica gracias al apoyo y la paciencia de sus compañeros.

Después del partido, Juan regresó a casa sintiéndose feliz y emocionado por haber tenido una oportunidad para demostrar lo que podía hacer. Decidió seguir practicando y mejorando sus habilidades para el fútbol.

A partir de ese día, Juan se unió a los partidos en la plaza con más frecuencia y siempre era bienvenido por los otros niños. Con el tiempo, se convirtió en uno de los mejores jugadores del grupo y su amor por el deporte creció aún más.

La historia de Juan demuestra que nunca es tarde para aprender algo nuevo y que con perseverancia y esfuerzo, podemos superar nuestras limitaciones.

También nos enseña la importancia de ser amables y respetuosos con los demás, incluso si no son tan buenos como nosotros en algo determinado. Al final, lo que cuenta es divertirse juntos y disfrutar del juego.

FIN.

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