El campamento de la señorita Laura
Había una vez en un pequeño pueblo llamado Villa Inglés, donde la profesora de inglés, la señorita Laura, era muy querida por todos los niños.
Cada fin de año, ella organizaba un campamento especial en el bosque cercano, donde los niños podían divertirse y aprender al mismo tiempo. Este año, la señorita Laura decidió asignar a cada niño una tarea especial para que se encargaran durante el campamento.
Había varios niños emocionados por participar: Sofía sería la encargada de organizar juegos; Mateo estaría a cargo del fuego para cocinar las comidas; Valentina cuidaría de las plantas y animales del bosque; y Tomás sería el responsable de mantener limpia el área del campamento.
El primer día del campamento llegó y los niños estaban ansiosos por comenzar con sus tareas. La señorita Laura les explicó lo importante que era trabajar juntos y apoyarse mutuamente para que todo saliera bien.
Los niños asintieron con entusiasmo y se dispusieron a cumplir con sus responsabilidades. Sofía organizó divertidos juegos como carreras de sacos y búsqueda del tesoro, que mantuvieron a todos entretenidos y risueños.
Mateo demostró ser un excelente chef al preparar deliciosas comidas alrededor de la fogata, mientras Valentina exploraba el bosque descubriendo nuevas especies de plantas y animales. Sin embargo, Tomás estaba teniendo problemas con su tarea. A pesar de su esfuerzo por mantener limpio el área del campamento, parecía que siempre quedaba algo fuera de lugar.
Los demás niños notaron su frustración y decidieron ayudarlo. Juntos recogieron basura, barrían hojas caídas y ordenaron todo el lugar.
Al final del campamento, la señorita Laura reunió a todos los niños para felicitarlos por su arduo trabajo en equipo. Les explicó lo orgullosa que estaba de ver cómo habían superado desafíos juntos y se habían apoyado mutuamente en todo momento. "- ¡Chicos! ¡Han hecho un trabajo increíble! Cada uno cumplió su tarea con dedicación y compromiso.
Pero lo más importante es que aprendimos que cuando trabajamos juntos podemos lograr grandes cosas", dijo la señorita Laura con una sonrisa.
Los niños se miraron unos a otros con alegría en sus ojos, sintiéndose orgullosos no solo por haber completado sus tareas individuales sino también por haber formado un equipo sólido y unido.
Desde ese día en adelante, los niños recordaron aquella experiencia como un momento especial en sus vidas donde aprendieron la importancia del trabajo en equipo, la solidaridad y la amistad. Y cada año esperaban ansiosos el próximo campamento organizado por la querida profesora de inglés, listos para enfrentar nuevos desafíos juntos.
FIN.