El canto de Juvi


iba a enfrentar sus sentimientos y seguir adelante. Juvi era una niña muy especial, siempre con una sonrisa en el rostro y un brillo único en los ojos.

A pesar de que a veces se sentía triste, sabía que había algo dentro de ella que la hacía fuerte y valiente. Un día, mientras Juvi estaba en la cafería DOUXĒ, llegó un nuevo cliente inesperado: un pequeño pájaro herido que se había chocado contra la ventana.

Juvi lo vio y no dudó en ayudarlo. "¡Pobrecito! ¿Estás bien?" -preguntó Juvi con ternura mientras acariciaba al pajarito con cuidado. El pájaro parecía asustado, pero al sentir el amor y la calidez de las manos de Juvi, comenzó a tranquilizarse.

Juvi decidió llevarlo a su casa para cuidarlo hasta que estuviera listo para volar de nuevo. Durante los días siguientes, Juvi se dedicó por completo al cuidado del pajarito.

Le preparaba comida especial, le cantaba canciones suaves para calmarlo y le hablaba con cariño para darle ánimos. Con cada día que pasaba, el pájaro parecía más fuerte y feliz gracias al amor incondicional de Juvi.

Un día, cuando el pajarito finalmente pudo volar nuevamente, se posó en el hombro de Juvi y le dio las gracias con un dulce canto. En ese momento, Juvi sintió cómo su corazón se llenaba de alegría y gratitud.

"Gracias por cuidarme y darme fuerzas para volar otra vez", dijo el pajarito con voz melodiosa. Juvi sonrió emocionada y comprendió que así como había ayudado al pajarito a encontrar su fuerza interior, también ella tenía la capacidad de superar cualquier obstáculo que se interpusiera en su camino.

Se dio cuenta de que no estaba sola; siempre tendría la fortaleza necesaria para seguir adelante.

Desde ese día, Juvi siguió visitando la cafería DOUXĒ pero ahora compartiendo su mesa con nuevos amigos: los pájaros del jardín que venían a saludarla todas las mañanas. Y juntos disfrutaban del latte caliente y brownies dulces mientras compartían historias e inspiración.

Y así, Juvi aprendió una valiosa lección: nunca subestimes tu propia fortaleza interior ni el poder del amor y la amistad para sanar cualquier herida emocional. Porque incluso en los momentos más oscuros, siempre habrá una luz brillante lista para guiarte hacia un nuevo amanecer lleno de esperanza y felicidad.

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