El canto mágico en el bosque



Había una vez en un pequeño pueblo rodeado de un gran bosque, una niña llamada Electra. Electra era muy curiosa y siempre le gustaba explorar lugares nuevos, a pesar de las advertencias de sus papás.

Un día, mientras jugaba en el jardín de su casa, Electra escuchó el canto de un pájaro que provenía del bosque. La curiosidad la invadió y decidió adentrarse en el espeso bosque para descubrir de dónde venía ese hermoso sonido.

"Electra, no vayas al bosque sin nosotros", le advirtieron sus papás preocupados. Pero Electra, emocionada por la aventura, ignoró las advertencias y se adentró en el bosque. Mientras caminaba entre los árboles y arbustos, Electra se dio cuenta de que estaba perdida.

El sol comenzaba a ocultarse y los sonidos del bosque empezaban a asustarla. La noche cayó sobre el bosque y Electra comenzó a llorar arrepentida por no haberle hecho caso a sus papás.

De repente, entre la oscuridad, vio una luz brillante que provenía de una pequeña cabaña. Sin pensarlo dos veces, corrió hacia allí en busca de ayuda.

Al llegar a la cabaña, tocó la puerta tímidamente y fue recibida por una amable anciana que vivía sola en medio del bosque. La anciana escuchó la historia de Electra con paciencia y le ofreció pasar la noche en su cabaña hasta que amaneciera.

Durante esa noche, la anciana enseñó a Electra importantes lecciones sobre escuchar a sus papás, seguir las reglas y ser prudente al tomar decisiones. Electra entendió lo importante que era valorar el cuidado y amor de sus padres.

Al día siguiente, cuando salió el sol, la anciana acompañó a Electra de regreso a su casa donde sus papás la esperaban angustiados. Al verla sana y salva, sus papás abrazaron a Electra con alegría pero también con seriedad por haber desobedecido.

"Gracias por traerla sana y salva", dijo su mamá mientras acariciaba su cabello. "Espero que hayas aprendido la importancia de escucharnos". Electra asintió con tristeza pero también con determinación. Desde ese día comprendió que siempre debía prestar atención a las advertencias y consejos de sus padres para mantenerse segura.

Y así termina esta historia infantil sobre Eletra: una niña curiosa que aprendió valiosas lecciones tras perderse en el bosque por no hacerle caso a sus papás.

FIN.

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