El castillo de la amistad

Alba estaba muy triste, ella quería hacer el barco más bonito del mundo, pero no sabía cómo empezar. Así que decidió sentarse en la arena y pensar en una solución.

De repente, escuchó una voz detrás de ella: "-¿Qué te pasa Alba?" era su amigo elefante que se acercaba a ella con sus grandes orejas moviéndose al compás de su caminar. "-No puedo hacer el barco que quiero", respondió Alba con lágrimas en los ojos.

En ese momento, su amigo unicornio llegó volando por encima de ellos con sus alas brillantes y dijo: "-¡No te preocupes Alba! Yo sé cómo hacer un barco hermoso".

Pero cuando intentaron comenzar a construirlo, el viento soplaba fuerte y las olas eran demasiado altas para trabajar. Fue entonces cuando la mariposa desafiante sugirió otra idea. "-¿Por qué no hacemos un castillo de arena?", preguntó la mariposa mientras revoloteaba alrededor de ellos.

Todos estuvieron de acuerdo y comenzaron a construir un gran castillo juntos. Pero justo cuando pensaban que habían terminado, una ola gigante se acercó y lo arruinó todo.

Alba estaba a punto de darse por vencida cuando su amigo elefante dijo: "-No te rindas todavía Alba, ¡tenemos que seguir intentándolo!"Y así fue como decidieron trabajar juntos para construir el mejor castillo posible. Cada uno usó sus habilidades especiales para dar forma al castillo perfecto.

La mariposa desafiante decoró las torres con flores y hojas, el unicornio presumido añadió brillo y purpurina a la arena, mientras que el elefante loco hizo un gran foso alrededor del castillo. Finalmente, después de mucho esfuerzo y trabajo en equipo, construyeron el castillo más hermoso que jamás habían visto.

Alba estaba muy feliz de haber encontrado una solución creativa junto a sus amigos. "-¡Gracias chicos! Nunca habría podido hacer esto sin ustedes", dijo Alba mientras abrazaba a cada uno de ellos.

Y así, aprendieron que trabajar juntos puede llevarlos a lugares maravillosos y lograr cosas increíbles.