El cofre del coraje
Había una vez en un barrio muy tranquilo, dos vecinos llamados Camilo y Milena. Ellos se habían conocido desde pequeños y siempre habían sido muy buenos amigos. Pero con el tiempo, algo fue cambiando dentro de ellos.
Se dieron cuenta de que sentían algo más que amistad el uno por el otro. Sin embargo, ninguno de los dos se atrevía a decir lo que sentía.
Tenían miedo de arruinar su amistad o ser rechazados por el otro. Un día, mientras Camilo estaba paseando por la calle pensando en cómo decirle sus sentimientos a Milena, vio algo extraño en una casa abandonada del barrio.
Decidió acercarse para ver qué era y descubrió un cofre antiguo lleno de objetos curiosos. Camilo abrió el cofre y encontró un pergamino con una inscripción que decía: "Para encontrar la felicidad debes enfrentar tus miedos". Esto hizo reflexionar a Camilo sobre su situación con Milena.
Cuando volvió a su casa, decidió hablar con ella y contarle todo lo que sentía. Así que esa misma tarde fue a visitarla:- Hola Milena - dijo tímidamente Camilo. - Hola Camilo ¿cómo estás? - respondió ella sonriendo. - Bien gracias...
mira quería decirte algo importante - continuó nervioso. - Dime Cami ¿qué pasa? Camilo tomó aire profundamente antes de continuar:- Sabes Milena... desde hace tiempo siento algo especial por ti...
no sé cómo explicarlo pero creo que estoy enamorado de ti. Milena quedó sorprendida al escuchar esto, pero al mismo tiempo sintió una emoción inexplicable en su corazón. - Camilo... yo también siento algo especial por ti - dijo ella sonriendo.
Los dos se abrazaron y se dieron cuenta de que habían estado perdiendo el tiempo por miedo a expresar sus sentimientos. Desde ese día, empezaron a salir juntos y fueron muy felices.
El cofre antiguo les había enseñado una gran lección: que debemos enfrentar nuestros miedos para encontrar la felicidad. Y así lo hicieron Camilo y Milena. Desde entonces, el barrio entero los veía siempre juntos y enamorados. Todos admiraban su valentía al enfrentar sus miedos y ser honestos con sus sentimientos.
Y así, esta historia de amor inspiró a muchos otros vecinos del barrio a hacer lo mismo: dejar atrás los miedos e ir tras la felicidad que merecen.
FIN.