El comienzo del viaje de Martina


Martina era una niña con una gran curiosidad por el mundo que la rodeaba. Siempre estaba preguntando, explorando y buscando respuestas a todas las preguntas que se le ocurrían. Llegó el fin de curso y Martina estaba emocionada por las vacaciones de verano, pero también un poco triste por tener que despedirse de su maestra y de sus compañeros de clase. Sin embargo, la maestra les recordó que todo final tiene un comienzo, y que el final de curso era el inicio de nuevas aventuras.

Durante las vacaciones, Martina decidió que quería descubrir más sobre la naturaleza que la rodeaba. Se propuso aprender sobre las plantas, los animales y el medio ambiente. Con la ayuda de su abuelo, que era un gran amante de la naturaleza, Martina comenzó a explorar el bosque cercano a su casa. A medida que descubría nuevas especies de plantas y animales, también se encontraba con desafíos: a veces se perdía entre los árboles, otras veces se enfrentaba a miedos como el de las arañas. Pero Martina no se rindió, y con valentía superó cada obstáculo que se le presentaba.

Un día, mientras exploraba una parte del bosque que no conocía, Martina encontró un pequeño arroyo. Al acercarse, descubrió que el agua estaba sucia y llena de residuos. En lugar de asustarse o entristecerse, Martina decidió hacer algo al respecto. Habló con su familia, con sus amigos y con la comunidad, buscando formas de limpiar el arroyo y proteger el medio ambiente. Juntos, organizaron una jornada de limpieza, plantaron árboles y trabajaron para concienciar a todos sobre la importancia de cuidar la naturaleza.

Al final de las vacaciones, Martina regresó a la escuela con una experiencia increíble para compartir. Les contó a sus compañeros sobre todas las cosas maravillosas que había descubierto en el bosque, pero también sobre los desafíos que enfrentó y cómo los superó. Su maestra, orgullosa de Martina, les recordó que todo final tiene un comienzo, y que el comienzo del compromiso de Martina con el medio ambiente era solo el inicio de un viaje más grande.

Martina comprendió entonces que cada final es el principio de algo nuevo, y que su viaje de descubrimiento y cuidado del medio ambiente apenas había comenzado.

Dirección del Cuentito copiada!