El concurso del amor


Había una vez en un pequeño pueblo llamado Villa Esperanza, una niña llamada Breissi. Breissi era una niña alegre y curiosa, siempre buscando nuevas aventuras y aprendiendo cosas nuevas.

Sin embargo, había algo que la preocupaba: no tenía un novio. Un día, mientras caminaba por el parque del pueblo, Breissi se encontró con su mejor amiga, Lola. Lola era una niña muy inteligente y siempre tenía ideas geniales.

Breissi decidió contarle su preocupación sobre no tener un novio. "Lola, estoy triste porque todas mis amigas tienen novios y yo no", dijo Breissi con tristeza. Lola pensó por un momento y luego sonrió.

"¡Tengo una idea! Podemos organizar un concurso para encontrar al novio perfecto para ti". Breissi se emocionó al instante. "¡Eso suena divertido! ¿Cómo lo haremos?"Lola explicó que tendrían diferentes pruebas para los chicos interesados en ser el novio de Breissi. Habría pruebas de valentía, inteligencia y habilidades artísticas.

El día del concurso llegó y muchos chicos del pueblo se presentaron. Uno tras otro fueron pasando las pruebas pero ninguno lograba convencer a Breissi de ser su novio.

De repente, cuando ya parecía que nadie más iba a participar apareció Lucas, un chico tímido pero muy dulce que había estado observando desde lejos todo el tiempo. Lucas decidió participar en el último momento. "No tengo muchas habilidades especiales como los demás chicos aquí presentes", dijo Lucas tímidamente.

"Pero puedo ser un buen amigo y tratar a Breissi con respeto y cariño". Las palabras de Lucas tocaron el corazón de Breissi.

Ella se dio cuenta de que no necesitaba un novio que fuera el más valiente o el más inteligente, sino alguien que la tratara bien y la hiciera sentir especial. "Lucas, no importa si no tienes habilidades especiales", dijo Breissi con una sonrisa. "Lo importante es que seas tú mismo y me hagas feliz".

Los dos comenzaron a pasar tiempo juntos como amigos y poco a poco fueron conociéndose mejor. Descubrieron que tenían muchas cosas en común y disfrutaban de las mismas actividades.

Con el tiempo, su amistad se convirtió en algo más y Lucas se convirtió en el novio perfecto para Breissi. La historia de Breissi nos enseña que no siempre necesitamos buscar cualidades específicas en una pareja, sino encontrar a alguien que nos haga felices, nos respete y nos trate bien.

El amor verdadero puede estar más cerca de lo que imaginamos, solo debemos abrir nuestros corazones y darle una oportunidad.

Y así fue como Breissi encontró su novio ideal en Lucas, demostrando que el amor puede surgir incluso cuando menos lo esperamos. Y vivieron felices para siempre en Villa Esperanza.

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