El conejo enamorado del color amarillo


Había una vez en el bosque un conejo llamado Pancho, un conejito simpático y curioso que vivía aventuras todos los días. Un día, mientras Pancho caminaba por el bosque, vio a un hermoso conejo color amarillo llamado Lola. Era amor a primera vista. Pancho se enamoró perdidamente de Lola, pero se sentía triste y confundido.

Lola, ¿por qué eres amarilla? - preguntó Pancho con curiosidad.

- Bueno, Pancho, soy amarilla porque paso mucho tiempo bajo el sol - respondió Lola con una sonrisa.

Pancho no quería que el color los separara, así que decidió buscar una solución. Recorrió el bosque preguntando a los animales si habían visto algo o alguien que pudiera cambiar el color de Lola, pero nadie tenía una respuesta. Desanimado, Pancho decidió regresar a casa, pero en su camino se encontró con una hada del bosque.

¿Qué te preocupa, querido Pancho? - preguntó el hada.

- Estoy enamorado de Lola, pero su color amarillo nos separa - respondió Pancho con tristeza.

El hada, con una dulce sonrisa, le entregó a Pancho un frasco con polvo mágico.

- Este polvo hará que los colores dejen de importar. El verdadero amor siempre encuentra un camino - dijo el hada antes de desaparecer.

Animado por las palabras del hada, Pancho corrió a buscar a Lola. Sin dudarlo, esparció el polvo mágico sobre ellos, y en un abrir y cerrar de ojos, sus colores se mezclaron, creando un arcoíris brillante.

- ¡Pancho, qué ha sucedido! - exclamó Lola sorprendida.

- El hada del bosque nos brindó una solución, Lola. Ahora nuestro amor no tendrá barreras - dijo Pancho emocionado.

Desde ese día, Pancho y Lola vivieron felices, demostrando que el amor verdadero todo lo puede. Y así, con su amor multicolor, se convirtieron en un ejemplo de aceptación y respeto en el bosque. Los demás animales aprendieron a valorar las diferencias, comprendiendo que lo que realmente importa es lo que hay en el corazón.

Dirección del Cuentito copiada!