El Coraje de Los Cuatro Amigos
En un encantador bosque, donde los árboles susurraban secretos y el viento cantaba melodías, vivían cuatro amigos inseparables: Amistad, Malefico, Rescate y Coraje. Eran criaturas mágicas que, a pesar de sus diferencias, siempre se apoyaban mutuamente.
Un día soleado, mientras exploraban un claro, descubrieron un antiguo libro polvoriento abandonado entre las hojas. "¡Miren esto!", exclamó Amistad, emocionada. "Parece un libro de pociones mágicas".
"¿Deberíamos abrirlo?", preguntó Coraje, mirando con curiosidad el libro. "Podría ser peligroso".
"No hay peligro si lo hacemos juntos", respondió Rescate con una sonrisa. "Además, siempre podemos encontrar una manera de solucionarlo".
Así fue como decidieron abrir el libro. En su interior hallaron una receta para crear una poción que prometía ayudar a cualquier ser en apuros. Sin embargo, había una advertencia: "Quien beba la poción, también deberá afrontar sus miedos".
"¿Qué podría salir mal?", dijo Malefico, un duende travieso. Tenía una chispa de picardía en su naturaleza que siempre ocultaba buenos deseos. "Podría ser muy divertido".
Decidieron experimentar y buscar todos los ingredientes necesarios que el libro pedía. Reunieron hojas de30 plantas mágicas y semillas de flores exóticas. Cada amigo usó sus habilidades especiales: Amistad buscaba los componentes, Rescate planificaba la recolección, Coraje se adentraba en lugares peligrosos y Malefico tenía el don de hacer que las cosas sucedieran de manera divertida.
Finalmente, después de muchas risas, lograron crear la poción. En el instante en que la terminó, un destello de luz llenó el bosque y un gorgoteo burbujeante resonó. Los cuatro amigos estaban emocionados, pero Malefico tuvo una idea traviesa.
"¿Qué tal si tomamos un sorbito todos juntos y vemos qué sucede?", sugirió, mientras sonreía de forma astuta.
"¡Sí! ¡Vamos!", gritaron los otros tres al unísono, llenos de entusiasmo.
Tomaron la poción al mismo tiempo, pero pronto se dieron cuenta de algo: cada uno comenzó a ver visiones de sus miedos.
"¡Ayuda!", gritó Rescate, al ver que su amado bosque empezaba a encogerse. "¡Mi hogar!".
"No temas, amigo", dijo Coraje, tratando de tranquilizarlo, aunque él también se sentía pequeño y asustado.
"¡Miren!", exclamó Amistad, asustada. "¡Malefico! ¡Tienes que enfrentar tu miedo a no ser querido!".
Malefico, que siempre se había reído de su propia soledad, se dio cuenta de que a veces, su humor lo hacía sentir aislado. Con el apoyo de sus amigos, pudo enfrentar su miedo y demostrar que era un buen amigo, valiente y divertido.
"¡Chicos, hay que ayudarnos!", dijo Coraje, que ya había decidido que no podía dejar que el bosque desapareciera.
Juntos, cada uno enfrentando sus propios temores, se dieron cuenta de que la verdadera magia estaba en la amistad y el apoyo que se brindaban. Con coraje y determinación, comenzaron a ayudar a cada uno a enfrentar sus miedos.
"Así es, el amor y las amistades son más fuertes que cualquier miedo", dijo Rescate. Con cada paso que daban, el bosque cobraba vida nuevamente.
Cuando finalmente lograron superar sus miedos, la poción comenzó a brillar intensamente y, en un destello, todos regresaron a la normalidad. El bosque volvió a ser un lugar vibrante. Estaban agotados, pero llenos de alegría.
"¿Vieron? La verdadera poción fue nuestro apoyo activo y juntos podemos superar cualquier cosa", celebró Amistad.
"Y no olvidemos lo divertido que fue", añadió Malefico, riendo.
Desde ese día, el libro permaneció guardado, pero los cuatro amigos aprendieron una valiosa lección: la verdadera fuerza está en el valor que tienen para enfrentar sus propios temores y la amistad que los une. Así, juntos, vivieron muchas más aventuras, sabiendo que podían contar unos con otros siempre que lo necesitaran.
FIN.