El coraje de Marty
Había una vez un niño llamado Marty, a quien le encantaba viajar en el tiempo. Un día, encontró una máquina del tiempo y decidió probarla. Marty se subió a la máquina y programó el año 1770.
La máquina comenzó a moverse y cuando finalmente se detuvo, Marty salió de ella y se encontró en medio de un hermoso jardín lleno de flores. Mientras caminaba por el jardín, vio un grupo de personas pintando cuadros.
Se acercó a ellos para ver lo que estaban haciendo y descubrió que eran artistas famosos del siglo XVIII. "¡Qué increíble!" exclamó Marty emocionado.
"¿Puedo quedarme aquí un rato y ver cómo pintan?"Los artistas accedieron amablemente a dejar que Marty los observara mientras trabajaban. Mientras veía cómo creaban sus obras maestras, algo extraño sucedió: ¡de repente, las pinturas comenzaron a cobrar vida! Una pintura de una hermosa mujer con vestido rosa salió corriendo del lienzo hacia Marty.
"¡Ayuda! ¡Necesito tu ayuda!" gritó la mujer. Marty no sabía qué hacer al principio, pero luego recordó que había visto esta misma pintura en un libro sobre arte. Sabía que la mujer era María Antonieta, la reina de Francia.
"¿Qué puedo hacer para ayudarte?" preguntó Marty preocupado. María Antonieta explicó que su esposo estaba siendo amenazado por los rebeldes franceses y necesitaba ayuda para escapar del país antes de ser capturado.
Marty sabía que tenía que hacer algo para ayudar a la reina. Con la ayuda de los artistas, construyó un avión con materiales disponibles en ese momento y llevó a María Antonieta a un lugar seguro.
Cuando regresó al jardín, se dio cuenta de que las pinturas volvieron a ser simples obras de arte. Los artistas estaban asombrados por lo que habían visto y le preguntaron cómo había hecho todo eso. "¡Fue increíble!" dijo uno de los artistas.
"No solo eres un viajero del tiempo, sino también un héroe". Marty sonrió tímidamente y se subió a su máquina del tiempo para volver a casa.
Aprendió una gran lección sobre el valor del coraje y la importancia de ayudar a otros sin importar cuán difícil sea la tarea. Desde entonces, Marty siguió explorando diferentes épocas históricas, pero siempre recordaba su aventura en 1770 como una experiencia única e inolvidable.
FIN.