El corazón de Tommy

Tommy era un bebé muy especial, nació con un corazón enfermo que lo hacía sentir débil y cansado todo el tiempo.

Sus padres estaban muy preocupados por él, así que decidieron llevarlo a ver a la doctora Martina, quien se especializa en cuidar los corazones de los niños. La doctora Martina examinó al pequeño Tommy y le explicó a sus padres que necesitaba una operación para arreglar su corazón.

Los padres de Tommy estaban asustados porque nunca habían tenido que lidiar con algo así, pero confiaron en la experiencia de la doctora. Finalmente llegó el día de la operación y los doctores lograron arreglar el corazón de Tommy.

Después de unos días en el hospital, Tommy regresó a casa con sus padres. Se sentía mucho mejor y podía jugar como cualquier otro niño. Pero aunque ya no estaba enfermo, Tommy seguía visitando a la doctora Martina regularmente para asegurarse de que su corazón siguiera funcionando correctamente.

La doctora siempre lo recibía con una sonrisa y le preguntaba cómo estaba. Un día, mientras esperaba su turno en el consultorio de la doctora Martina, Tommy notó que había otro niño allí también.

El niño parecía triste y asustado. Tommy se acercó a él y le preguntó qué pasaba. "Tengo miedo", dijo el niño, "mañana tengo una operación en mi corazón".

Tommy recordó lo asustado que había estado antes de su propia operación e intento consolar al otro niño:"No te preocupes", dijo Tommy,"los doctores son muy buenos y la doctora Martina es la mejor. Yo también tuve una operación en mi corazón y ahora me siento mucho mejor".

El niño pareció sentirse un poco mejor después de hablar con Tommy, y cuando llegó su turno para ver a la doctora Martina, ya no estaba tan asustado.

Después de eso, cada vez que Tommy visitaba al consultorio de la doctora Martina, siempre se aseguraba de buscar a otros niños que pudieran estar asustados o tristes. Les contaba su propia historia e intentaba hacerles sentir mejor. Con el tiempo, Tommy se convirtió en un joven fuerte y saludable.

Pero nunca olvidó lo difícil que había sido pasar por una operación en su corazón. Siempre recordó cómo le había ayudado hablar con otros niños en situaciones similares a la suya.

Así que decidió estudiar medicina para convertirse en un doctor como la doctora Martina y ayudar a otros niños como ella lo había ayudado a él. Y aunque ya no necesitaba visitarla regularmente, siempre recordaría el cuidado y el amor que ella le había brindado cuando era pequeño.