El Cuento de la Reacción Química
En un lugar muy lejano, en el reino de los elementos, vivían Oxígeno y Hidrógeno. Oxígeno era muy valiente y siempre estaba listo para ayudar a los demás, mientras que Hidrógeno era un poco tímido pero muy ingenioso.
Un día, el rey Agua convocó a Oxígeno y Hidrógeno a su castillo. - 'Queridos amigos, necesito su ayuda. El reino está en peligro y solo ustedes dos pueden salvarlo', anunció el rey.
Resulta que el malvado Vapor, un villano travieso, estaba causando estragos en el reino, queriendo separar a todos los elementos. - 'No te preocupes, majestad. Haremos todo lo que esté en nuestras manos para detener a Vapor', prometió Oxígeno con determinación.
- 'Sí, lo lograremos juntos', agregó Hidrógeno, tratando de disimular su miedo. Los dos amigos emprendieron su aventura por el reino, enfrentando todo tipo de desafíos y obstáculos. Un día, mientras atravesaban el Valle de las Reacciones Químicas, se toparon con Vapor y sus compinches átomos rebeldes.
- 'No podrán detenerme, Oxígeno y Hidrógeno. Soy invencible', se burló Vapor con malicia. Oxígeno y Hidrógeno se miraron con determinación, sabiendo que debían actuar con astucia. Con un plan ingenioso, lograron unir sus fuerzas y desencadenar la reacción química perfecta.
Los átomos de Hidrógeno se unieron con los átomos de Oxígeno, formando moléculas de agua que arrastraron a Vapor lejos del reino, neutralizándolo por completo. La valentía y la inteligencia de Oxígeno y Hidrógeno habían triunfado.
El rey Agua los recibió con alegría y gratitud, agradeciéndoles por salvar al reino. Desde ese día, Oxígeno y Hidrógeno se convirtieron en héroes legendarios en el reino de los elementos, recordados por su valentía y su poderosa reacción.
Y así, la armonía y la unión siempre prevalecieron en el maravilloso reino de los elementos.
FIN.