El cumpleaños con mi amigo oso

Abigail era una niña muy curiosa y aventurera que vivía en un hermoso castillo en Villa La Angostura.

Siempre le gustaba explorar los alrededores del castillo, pero un día, mientras caminaba por el bosque, se encontró con un enorme oso. - ¡Hola! -dijo Abigail con una sonrisa- ¿Cómo te llamas? El oso la miró sorprendido y respondió:- Nunca antes había hablado con un ser humano. Me llamo Bruno.

A pesar de su tamaño imponente, Bruno no parecía ser peligroso. Abigail decidió acercarse más para conversar con él. - Hoy es mi cumpleaños -dijo Abigail emocionada-. ¿Quieres venir a mi fiesta? Bruno nunca había asistido a una fiesta de cumpleaños antes y estaba emocionado por la idea.

Así que aceptó la invitación de Abigail y juntos fueron al castillo. La fiesta fue genial: hubo música, juegos y mucha comida deliciosa para todos los invitados.

Incluso Bruno tuvo su propio pastel hecho especialmente para él por el chef del castillo. Abigail descubrió que aunque las apariencias pueden engañar, nunca debemos tener miedo de conocer nuevas personas o animales. Además aprendió que compartir momentos especiales como su cumpleaños puede hacer nuevos amigos inesperados.

Desde ese día en adelante, Abigail y Bruno se hicieron grandes amigos e incluso comenzaron a explorar juntos los lugares secretos del bosque cercano al castillo.

Y cada año desde entonces celebran juntos el cumpleaños de Abigail recordando aquel primer encuentro que les permitió conocerse y disfrutar de la vida juntos.