El cumpleaños en dos partes


Había una vez una niña llamada Sofía que cumplía dos añitos. Como estábamos en plena pandemia, sus papás decidieron festejar su cumpleaños en dos partes. En la tarde, invitaron a la familia de su papá y, a la noche, a la familia de su mamá.

Sofía estaba muy emocionada por tener dos celebraciones en un mismo día, así que ayudó a decorar la casa con globos y guirnaldas de colores. En la primera parte del festejo, jugó con sus primos, sopló las velitas de la torta y recibió muchos regalos. Estaba tan feliz que no podía parar de reír.

Cuando llegó la noche, la otra parte de la familia llegó con más regalos y mucha comida deliciosa. Sofía estaba sorprendida de ver a sus abuelos, tíos y primos reunidos para seguir festejando su cumpleaños. Se sentía muy querida y especial.

En un momento de la noche, Sofía se puso triste porque se dio cuenta de que había gente que no podía estar presente en su cumpleaños debido a la pandemia. Entonces, su mamá le dijo: "Sofía, aunque no estén aquí físicamente, sabemos que nos están cuidando y nos aman mucho. Siempre están en nuestro corazón".

Sofía sonrió y abrazó a su mamá. Comprendió que, aunque las circunstancias fueran difíciles, el amor de la familia siempre estaba presente. Esa noche durmió feliz, agradecida por haber tenido dos hermosas celebraciones de cumpleaños.

Y así, Sofía aprendió que el amor de la familia puede superar cualquier obstáculo, y que la unión y el cariño son lo más importante en la vida.

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