El cumpleaños mágico de India y Luna

India estaba emocionada por su cumpleaños número 7. Su mamá había preparado una gran fiesta en el jardín de la casa y había invitado a todos sus amigos del colegio.

Mientras India ayudaba a decorar el jardín con globos y serpentinas, algo mágico sucedió: apareció un unicornio blanco brillante en medio del césped. India se quedó sin palabras al ver al majestuoso animal que se acercaba lentamente hacia ella.

El unicornio tenía un cuerno dorado que brillaba bajo el sol y unas alas blancas que parecían hechas de nubes. "¡Hola! Soy India, ¿quién eres tú?" preguntó India con una sonrisa curiosa. "Soy Luna, un unicornio de las estrellas" respondió Luna con una voz dulce y melodiosa.

India no podía creer lo que veía. Había leído sobre unicornios en los cuentos de hadas, pero nunca pensó que uno podría aparecer en su propio jardín. "¿Qué haces aquí? ¿Quieres ser mi amiga?" preguntó India ilusionada.

Luna asintió con la cabeza y comenzó a contarle historias mágicas sobre su mundo. Le mostró a India cómo podía volar con sus alas y le enseñó algunos trucos divertidos para hacer con los globos de colores.

La fiesta continuaba mientras Luna seguía jugando con India. Pero cuando llegó la hora del pastel, algo extraño ocurrió: las velas se apagaron solas antes de que India pudiera soplarlas todas. "¿Qué pasó?" preguntó India preocupada mientras todos los invitados miraban sorprendidos.

"Es un mal presagio" dijo una de las abuelas de India con voz temblorosa. "Significa que algo malo va a pasar". India sintió un nudo en la garganta.

No quería que nada arruinara su cumpleaños, pero tampoco sabía cómo evitarlo. Fue entonces cuando Luna le susurró al oído:"No te preocupes, India. Yo puedo ayudarte a solucionar esto". Luna sacó su cuerno dorado y lo tocó delicadamente en el pastel.

De repente, todas las velas se encendieron por sí solas y comenzaron a bailar alrededor del pastel. Los invitados aplaudieron maravillados mientras India soplaba las velas sin problemas.

"¡Gracias, Luna! Eres la mejor amiga que alguien podría tener" exclamó India emocionada mientras abrazaba a su nuevo amigo unicornio. Desde ese día, Luna visitaba a India todos los días para jugar y hacer magia juntas.

Y cada vez que algo parecía salir mal, Luna estaba allí para ayudarla con su cuerno mágico y enseñarle que siempre hay una solución si uno cree en la magia de la amistad.