El cumpleaños solidario de las gemelas


Era el cumpleaños número catorce de Lucía y Agustina, las gemelas más unidas que podrías conocer. Desde pequeñas habían compartido todo, juguetes, ropa e incluso secretos.

Pero esta vez algo era diferente, ambas se sentían emocionadas por celebrar su cumpleaños juntas pero también había una sensación extraña en el aire. La fiesta comenzó temprano en la tarde y todas sus amigas estaban ahí para festejar con ellas. Había juegos, comida y música para todos los gustos.

Sin embargo, conforme pasaba el tiempo las gemelas parecían cada vez más preocupadas. "¿Qué pasa chicas? ¿No están disfrutando su cumpleaños?" - preguntó su mamá al notarlas cabizbajas.

"Sí mamá, estamos felices" - respondió Agustina con una sonrisa forzada. "Pero hay algo que nos preocupa" - continuó Lucía mirando a su hermana buscando apoyo. "Dinos qué pasa hijas" - insistió su papá acercándose a ellas.

Las gemelas se miraron entre sí antes de hablar al mismo tiempo:"Queremos ayudar a alguien en nuestro cumpleaños"Sus padres intercambiaron una mirada sorprendida mientras sus amigas seguían bailando sin enterarse de la conversación.

Las gemelas explicaron que habían estado pensando en cómo podían hacer del mundo un lugar mejor y decidieron que usarían su cumpleaños para ayudar a alguien necesitado. Después de discutir varias opciones decidieron visitar un orfanato cercano para llevar regalos y pasar tiempo con los niños.

La idea emocionó a todos, así que rápidamente empacaron juguetes, ropa y dulces para llevar. Cuando llegaron al orfanato, los niños estaban emocionados de ver a las gemelas y sus amigas. Comenzaron a jugar juntos y pronto se olvidaron de todo lo demás.

Las gemelas les contaron historias, les enseñaron juegos nuevos y rieron juntos. Al final del día, los niños del orfanato no querían que se fueran pero Lucía y Agustina sabían que habían hecho algo especial en su cumpleaños.

Aprendieron que incluso en un día tan importante para ellas podían hacer una diferencia en la vida de alguien más. A medida que crecieron, las gemelas siguieron ayudando a quienes lo necesitaban siempre que podían.

Y aunque cada cumpleaños era diferente, siempre encontraban una manera de hacerlo significativo para otros también.

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