El Defensor de la Selva


, siempre estaba en busca de nuevas aventuras. Un día, mientras exploraba la selva, se encontró con un grupo de animales que estaban en peligro. - ¡Ayuda! -gritó un mono desde lo alto de un árbol-.

Un cazador nos está persiguiendo. Alarich no dudó ni un segundo y corrió hacia el lugar donde provenía el grito. Allí se encontró con una familia de monos asustados que habían sido acorralados por un cazador furtivo.

- ¿Qué puedo hacer? -preguntó Alarich preocupado. - Necesitamos escapar de aquí antes de que sea demasiado tarde -respondió el mono líder del grupo-. Pero estamos atrapados entre los árboles y el cazador nos tiene rodeados.

Alarich pensó rápidamente y recordó que había visto una cueva cerca del río durante su última expedición. Si lograban llegar allí, podrían esconderse hasta que el cazador se fuera. - Síganme -dijo Alarich con determinación-. Conozco una cueva donde podemos estar a salvo.

Los monos confiaron en él y juntos comenzaron a correr hacia la cueva. El cazador intentaba seguirlos pero Alarich conocía bien la selva y logró despistar al hombre malvado.

Finalmente llegaron a la cueva y se escondieron allí hasta que sintieron que era seguro salir nuevamente. Después del incidente, Alarich decidió dedicarse a proteger los animales y su hábitat natural. Comenzó a estudiar sobre conservación ambiental y aprendió todo lo posible sobre cómo cuidar nuestro planeta.

Pronto se convirtió en un defensor de los animales y viajó por todo el mundo para enseñar a otros la importancia de cuidar nuestro hogar.

- ¿Por qué te gusta tanto ayudar a los animales? -le preguntó un niño durante una de sus charlas educativas. - Porque ellos son nuestros amigos -respondió Alarich-. Y si queremos tener un mundo mejor, tenemos que aprender a vivir en armonía con todos los seres vivos que habitan en él.

Desde ese día, Alarich continuó explorando y descubriendo maravillas del mundo natural. Pero siempre tuvo presente su compromiso con la protección del medio ambiente y la vida animal.

Gracias a su valentía y perseverancia, muchos otros aprendieron sobre la importancia de cuidar nuestra casa común.

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