El desafío ecológico en Casa Abierta de Nazareth
En el colegio Casa Abierta de Nazareth, los amigos Juan, José, Soto y Raúl estaban preocupados por el cambio climático. Observaban cómo la temperatura subía cada año y cómo los desastres naturales se volvían más frecuentes.
Decidieron que tenían que hacer algo al respecto. - ¡Chicos, tenemos que encontrar una forma de motivar a nuestros compañeros para que tomen acciones contra el calentamiento global! - exclamó Juan con determinación.
Los cuatro amigos se reunieron en la biblioteca del colegio y elaboraron un plan. Decidieron organizar un concurso de proyectos ecológicos para despertar el interés de sus compañeros. - ¡Vamos a mostrarles lo importante que es cuidar el planeta! - dijo José emocionado.
Los chicos se pusieron manos a la obra y distribuyeron folletos, carteles y volantes invitando a todos en la escuela a participar. Pronto, el colegio estaba lleno de entusiasmo e ideas sobre cómo proteger el medio ambiente. Llegó el día del concurso y todos estaban emocionados.
Los alumnos presentaron proyectos sobre reciclaje, reforestación y ahorro de energía. Fue inspirador ver el compromiso de sus compañeros. Sin embargo, justo cuando estaban por anunciar a los ganadores, un fuerte viento comenzó a soplar.
Todos miraron hacia afuera y vieron que una tormenta se acercaba. En ese momento, comprendieron la urgencia de sus acciones. - ¡Tenemos que cuidar el planeta para evitar más desastres como este! - exclamó Soto con preocupación.
Los amigos se unieron para recoger toda la basura que el viento había esparcido y luego continuaron con el concurso. Finalmente, eligieron a los ganadores y se comprometieron a implementar los proyectos en la escuela.
La tormenta pasó y el colegio se iluminó con nuevos árboles plantados y contenedores de reciclaje. Todos se sentían orgullosos de trabajar juntos por un futuro sostenible. Y así, Juan, José, Soto y Raúl lograron inspirar a sus compañeros a tomar medidas contra el cambio climático.
FIN.