El desafío en la cancha contra el virus

Fernando era un niño apasionado por el baloncesto. Jugaba todos los días en la cancha del parque con sus amigos. Un día, la noticia de un virus peligroso que estaba afectando a muchas personas llegó a su ciudad. Las autoridades recomendaron tomar medidas de prevención para evitar el contagio. La mamá de Fernando le explicó la importancia de lavarse las manos, usar barbijo y mantener distancia social.

Fernando y sus amigos decidieron que no dejarían que el virus arruinara su pasión por el baloncesto. Crearon un plan para seguir jugando de manera segura.

-'Chicos, tenemos que ser creativos para evitar el contagio', dijo Fernando.

-'¡Sí! Podemos designar a un encargado de sanitizar la pelota después de cada juego', sugirió Martín.

-'Y podríamos marcar círculos en el piso para mantenernos separados', propuso Valentina.

Fernando y sus amigos implementaron todas estas medidas y continuaron disfrutando del baloncesto mientras se protegían del virus. Pero un día, Fernando se resbaló y se lastimó el tobillo. Todos estaban preocupados.

-'No puedo jugar por un tiempo', dijo Fernando con tristeza.

-'Pero podemos seguir cuidándonos juntos. Te ayudaremos a recuperarte', aseguró Martín.

Fernando se recuperó con el apoyo de sus amigos. A medida que pasaba el tiempo, el virus comenzó a desaparecer gracias a las medidas de prevención de la comunidad. Finalmente, todos pudieron volver a la cancha sin miedo. Fernando y sus amigos aprendieron que, con esfuerzo y solidaridad, podían superar cualquier desafío, incluso al enfrentarse a un virus. Y lo más importante, nunca dejaron de disfrutar su pasión por el baloncesto.