Había una vez en la escuela "Arcoíris de Saberes" un grupo de niños muy especiales: Sofía, Martín, Valentina, Tomás y Lucía.
Ellos eran conocidos por ser los más inteligentes de toda la escuela y siempre destacaban en todas las materias, excepto en matemáticas.
Un día, el maestro Juan les propuso resolver un problema matemático muy difícil que valía el 50% de la nota del trimestre.
El desafío era sumar fracciones con diferente denominador y ninguno de los niños sabía cómo hacerlo.
Se dieron cuenta de que debían cooperar entre ellos si querían tener éxito.
- ¡Chicos, tenemos que unir fuerzas para resolver este problema!
-exclamó Sofía.
- Sí, juntos podemos lograrlo -dijo Martín con determinación.
Decidieron reunirse en la biblioteca después de clases para estudiar juntos y resolver el desafío.
Cada uno aportaba sus ideas y conocimientos, pero no lograban dar con la solución correcta.
Fue entonces cuando Valentina tuvo una brillante idea.
- ¿Y si utilizamos colores para representar las fracciones?
Así será más fácil visualizarlas -propuso Valentina.
Todos estuvieron de acuerdo y comenzaron a dibujar las fracciones en diferentes colores.
Poco a poco fueron entendiendo cómo sumarlas y finalmente llegaron a la respuesta correcta.
Estaban emocionados por haber resuelto el problema juntos gracias a la creatividad de Valentina.
Al día siguiente, presentaron su solución al maestro Juan quien quedó impresionado por su trabajo en equipo y creatividad.
- ¡Felicidades chicos!
Han demostrado que trabajando juntos pueden lograr grandes cosas.
Estoy muy orgulloso de ustedes -dijo el maestro Juan con una sonrisa.
Desde ese día, los cinco amigos se convirtieron en inseparables y siempre trabajaban en equipo para resolver cualquier desafío que se les presentara.
Aprendieron que la cooperación y la creatividad son herramientas poderosas que los llevarían lejos en la vida.
Y así, Sofía, Martín, Valentina, Tomás y Lucía se convirtieron en un ejemplo para toda la escuela "Arcoíris de Saberes", demostrando que cuando se trabaja en equipo no hay problema imposible de resolver.