El Descubrimiento
Rex vivía en un valle escondido entre montañas. A pesar de ser un dinosaurio con alas pequeñas y débiles, siempre había sido objeto de burlas por parte de sus amigos.
Un día, mientras exploraba el valle, se topó con un grupo de arqueólogos que estaban excavando fósiles. Intrigado, se acercó a observar. -¡Hola, pequeño amigo! ¿Qué haces por aquí? -le preguntó amablemente uno de los arqueólogos. -Hola, soy Rex. Me encanta explorar el valle y aprender cosas nuevas.
-respondió Rex con entusiasmo. Los arqueólogos le explicaron que estaban buscando fósiles de dinosaurios para estudiar su historia. Rex se emocionó al escuchar esto. A partir de ese momento, decidió ayudar a los arqueólogos en su búsqueda.
Con el paso de los días, Rex aprendió mucho sobre los diferentes tipos de dinosaurios que habían habitado la tierra en el pasado. También descubrió que, a pesar de sus alas pequeñas, podía contribuir de muchas maneras.
Rex se sintió valorado y querido por primera vez en mucho tiempo. Al final del día, regresaba a casa con una sonrisa en el rostro, sabiendo que su singularidad no era un impedimento, sino una ventaja.
FIN.