El Día de la Alegría en el Jardín de Infantes
Había una vez en un pequeño pueblo, un jardín de infantes muy especial. En este jardín, todas las mañanas eran mágicas, pero el día de los jardines de infantes era aún más especial.
Los pequeños alumnos estaban emocionados, ya que sabían que tendrían un día lleno de juegos, risas y diversión. La señorita Marina, la maestra del jardín de infantes, había planeado un día increíble para todos. Al comenzar la jornada, los niños llegaban con sus rostros llenos de entusiasmo.
-¡Buenos días, chicos! ¡Hoy será un día maravilloso! -exclamó la señorita Marina con alegría. -¿Qué juegos hemos preparado para hoy, señorita? - preguntó Juanito, con una sonrisa ansiosa en su rostro.
-¡Sorpresa, sorpresa! Tendremos una búsqueda del tesoro, una obra de teatro y un festín de dulces saludables! -respondió la maestra emocionada. Los niños no podían contener su felicidad y comenzaron a jugar y reír sin parar. En la búsqueda del tesoro, descubrieron pistas ingeniosas escondidas por todo el jardín.
En la obra de teatro, se vistieron con coloridos trajes y representaron un cuento clásico, arrancando carcajadas del público.
La señorita Marina les enseñó sobre la importancia de la alimentación saludable, y compartieron una deliciosa merienda llena de frutas y vegetales. Al finalizar el día, los padres se acercaron al jardín para ver una muestra de las actividades. Los pequeños actuaron con valentía y orgullo, demostrando todo lo que habían aprendido y disfrutado.
Todos se despidieron con abrazos llenos de alegría, prometiendo recordar ese día por siempre. El Día de la Alegría en el Jardín de Infantes fue un día memorables y lleno de felicidad que quedó grabado en el corazón de todos los presentes.
FIN.