El día de los amiguitos
Había una vez en un hermoso bosque, un grupo de amiguitos muy peculiares: Lucas el conejo, Martina la osita, Benjamín el zorrito y Lola la pajarita. Ellos siempre jugaban juntos y se divertían mucho, pero un día, algo diferente sucedió.
"¡Hola amiguitos! ¿Qué les parece si hoy jugamos a un nuevo juego que inventé? se pronunció Martina con emoción. "¡Sí, sí! Queremos jugar, queremos jugar!" exclamaron los demás con alegría.
Entonces, Martina explicó las reglas del juego que ella misma ideó, las cuales eran muy simples y justas. Cada amiguito tendría una tarea específica para llevar a cabo y todos tendrían que colaborar para lograr el objetivo. De este modo, todos serían igualmente importantes y todos ganarían juntos.
Los amiguitos se pusieron manos a la obra y, con mucha cooperación y risas, cumplieron todas las tareas. El final del juego llegó y, para sorpresa de todos, habían logrado el objetivo en conjunto.
Estaban felices y orgullosos de haber trabajado juntos y de haber logrado algo especial. Desde ese día, entendieron que para divertirse no hace falta competir ni ser mejor que el otro, sino que lo importante es colaborar, ser justos y valorar a cada uno igualmente.
Y así, los amiguitos continuaron jugando y viviendo muchas aventuras juntos, siempre recordando la maravillosa lección que habían aprendido.
FIN.