El día de Nahuel en el banco
Nahuel estaba sentado en el banco del parque, esperando a su madre que se había ido al banco a retirar dinero. Mientras tanto, Nahuel comenzó a observar a su alrededor y vio a un señor mayor que parecía necesitar ayuda.
Sin dudarlo, Nahuel se acercó al señor y le ofreció su ayuda. Juntos, buscaron un lugar para sentarse y charlaron mientras esperaban. El señor le contó a Nahuel historias emocionantes de su juventud, y Nahuel escuchaba atentamente, disfrutando cada palabra.
Al poco tiempo, la madre de Nahuel regresó del banco, y al verlo conversando amistosamente con el señor, se sintió orgullosa del espíritu amable y solidario de su hijo.
Desde ese día, Nahuel aprendió que siempre hay oportunidades para ayudar a los demás, incluso cuando estamos ocupados con nuestras propias vidas. Esa experiencia lo marcó y siempre recordó la importancia de ser amable y solidario con los demás, sin importar la situación en la que nos encontremos.
FIN.