El día del campesino

En un pequeño pueblo llamado Villa Verdecita, vivía un campesino llamado Mario. Todos los días, Mario se levantaba temprano para cuidar de su granja, donde cultivaba frutas y verduras para la comunidad.

Un día, la noticia sobre el Día del Campesino se extendió por el pueblo. Todos estaban emocionados por celebrar y agradecer a los campesinos por su arduo trabajo. "¿Qué es el Día del Campesino, papá?", preguntó Joaquín, el hijo de Mario.

"Es un día especial en el que la gente reconoce la importancia del trabajo de los campesinos en la producción de alimentos", respondió Mario. Joaquín se emocionó al escuchar esto y decidió hacer algo especial para su papá.

Con la ayuda de sus amigos, planearon una gran fiesta sorpresa para celebrar a Mario y a los demás campesinos del pueblo. El día de la fiesta, el pueblo se llenó de colores y risas.

Joaquín y sus amigos prepararon un escenario para que los campesinos compartieran sus historias y canciones. Todos se unieron para disfrutar de un delicioso banquete con los productos frescos de la granja de Mario. Al final del día, Mario se sintió conmovido al ver cómo el pueblo reconocía y valoraba su arduo trabajo.

Desde ese día, el Día del Campesino se convirtió en una celebración anual llena de amor y gratitud hacia aquellos que trabajan la tierra para alimentar a todos. Porque, como decía Mario, "Sin los campesinos, no habría comida en la mesa".