El día en que los animales domésticos se unieron para ayudar

En una granja en el campo, vivían varios animales domésticos: el perro Fido, el gato Mishi, el caballo Rayo, el gallito Totó y la vaca Lola. Todos vivían felices ayudando a los granjeros en sus tareas diarias.

Pero un día, una terrible tormenta azotó la granja, y el granero donde guardaban la comida resultó seriamente dañado. Los granjeros estaban desesperados, no sabían cómo arreglarlo.

Fido, siendo el más listo de todos, tuvo una idea: reunir a todos los animales para trabajar juntos y arreglar el granero. "Escuchen, compañeros, si unimos nuestras fuerzas, podemos reconstruir este granero y ayudar a los granjeros. ¿Qué dicen?"

Todos estuvieron de acuerdo y se pusieron manos a la obra.

Mishi usó su agilidad para subir y bajar llevando herramientas en su hocico. Rayo empleó su fuerza para levantar las pesadas tablas. Totó, con su pico, martillaba los clavos en su lugar. Y Lola, con su tamaño imponente, empujaba los materiales al lugar adecuado.

Trabajaron sin descanso, y al atardecer, el granero había sido reparado gracias al esfuerzo conjunto de todos los animales. Los granjeros se sorprendieron al ver que sus animales habían ayudado de esa forma.

"¡Muchas gracias, amigos! Sin su ayuda, no hubiéramos podido hacerlo", agradeció el granjero.

Desde ese día, los animales de la granja aprendieron que trabajando juntos podían superar cualquier desafío. Y cada vez que alguien necesitaba ayuda, recordaban la tormenta y el granero, y acudían en seguida para colaborar.

Y así, la granja se convirtió en un lugar donde la solidaridad y la amistad entre animales y humanos reinaba para siempre.