El día en que los celulares tocaron el jardín
Era un soleado sábado en el jardín de la escuela primaria "El Arco Iris". Los niños estaban llenos de energía, corriendo y jugando entre los árboles y flores que decoraban el lugar. Ana, una nena curiosa de diez años, observaba a sus amigos jugar al fútbol, pero ella prefería hacer algo diferente.
"Chicos, ¿por qué no usamos nuestros celulares para crear algo divertido?" - propuso Ana mientras sacaba su teléfono.
"¿Y qué se te ocurre?" - preguntó Lucas, acariciando la pelota de fútbol.
"¡Podemos hacer un vídeo de aventuras!" - sugirió Ana con entusiasmo.
Los otros niños se miraron con incertidumbre. A veces, la tecnología parecía alejarles de los juegos al aire libre; sin embargo, el brillo en los ojos de Ana los convenció.
Así que todos se agruparon y comenzaron a planear su video. Establecieron un guion simple: un grupo de exploradores que descubren un tesoro escondido en el jardín.
Mientras se preparaban, Ana tuvo una buena idea. "¡Voy a usar una aplicación de edición! Así podremos añadir música y efectos. ¡Va a ser genial!" - exclamó.
Los chicos corrieron a buscar objetos que pudieran usar como
FIN.