El día especial en mi escuelita

Había una vez en un pequeño pueblo, una escuelita muy especial. Era la más linda de todas, con sus alegres colores y un patio grande y hermoso.

En esta escuelita, los niños y niñas iban a aprender, a hacer amigos y a cuidar de su querido hogar educativo. Un día, la maestra llamó a todos los niños y niñas al patio para tener una importante conversación.

-¡Niños y niñas! Hoy es un día muy especial, vamos a realizar una actividad muy importante para nuestra escuelita. Vamos a sembrar un árbol juntos para cuidar y embellecer aún más nuestro patio.

Todos los niños y niñas se emocionaron mucho con la idea, y enseguida comenzaron a buscar el lugar perfecto para plantar su árbol. Mientras buscaban, aprendieron sobre la importancia de cuidar la naturaleza y cómo las plantas y árboles nos dan aire puro y sombra fresca.

Después de encontrar el lugar perfecto, todos juntos plantaron el árbol, lo regaron con mucho amor y le prometieron cuidarlo todos los días. Desde ese día, la escuelita se sentía aún más especial, llena de vida y amor.

Los niños y niñas aprendieron que cuidar su escuelita era una responsabilidad de todos, y que al hacerlo estaban aprendiendo a cuidar de su planeta. Con el paso de los días, el árbol creció fuerte y hermoso, al igual que la amistad entre los niños y niñas.

Desde entonces, la escuelita se volvió un lugar aún más feliz, lleno de comprensión, aprendizaje y amor. Los niños y niñas se sentían afortunados de pertenecer a una escuelita tan especial, y todos juntos prometieron seguir cuidándola con todo su corazón.