El día nublado en la Plaza arte urbano
Había una vez en la Plaza arte urbano, un día nublado en el que los colores de los grafitis parecían apagados y tristes.
Los vecinos de la plaza, Lucas y Sofía, notaron que el ánimo de la plaza no era el mismo. - ¿Por qué todo se ve tan opaco hoy? - preguntó Sofía. - Creo que la plaza necesita un poco de color y alegría - respondió Lucas.
Decidieron entonces buscar una solución para animar a su querido lugar de encuentro. Caminaron por la plaza buscando ideas y, de repente, encontraron a un viejo artista callejero llamado Don Manuel. - ¿Qué les preocupa a ustedes dos? - preguntó el anciano.
- La plaza se ve muy triste hoy, queremos alegrarla - explicó Sofía. Don Manuel les dijo que conocía una manera de devolver la alegría a la plaza: un mural comunitario. Convocaron a los vecinos y, entre todos, planearon el diseño del mural.
Cada uno aportaría su estilo y colores favoritos. El día de la pintada, el sol hizo su aparición entre las nubes, como si quisiera darles ánimo. Los vecinos se dispusieron a pintar con entusiasmo, cada pincelada era un destello de alegría.
Al terminar, la plaza lucía un mural vibrante y lleno de vida. Los colores resaltaban en medio de la ciudad gris. Los vecinos se abrazaron felices con su obra.
Desde ese día, la Plaza arte urbano se convirtió en un lugar aún más especial, donde la tristeza no tenía cabida.
FIN.