El día que todos aprendimos a actuar frente a una emergencia

Había una vez en la ciudad de Buenos Aires, un grupo de amigos que vivían en un edificio muy grande y colorido. Ellos se llamaban Martina, Tomás, Sofía y Mateo.

Un día, mientras jugaban en el patio del edificio, escucharon una sirena sonar muy fuerte. Al principio, no sabían qué hacer, pero pronto se dieron cuenta de que era la alarma de incendio.

Todos se miraron preocupados, pero Sofía, que era muy valiente, les dijo: '- ¡Debemos actuar rápido y con cuidado! Vamos a recordar lo que nos enseñaron en la escuela sobre cómo actuar en caso de emergencia.' Entonces, recordaron que debían mantener la calma, buscar la salida más cercana y no usar el ascensor en caso de incendio.

Tomás, que era muy listo, recordó que debían tocar la puerta de cada departamento para asegurarse de que todos estuvieran enterados de la emergencia.

Así fue como, siguiendo cada uno de los pasos aprendidos, lograron evacuar el edificio y ponerse a salvo. Una vez afuera, se dieron cuenta de que todos los vecinos estaban a salvo gracias al trabajo en equipo y a la calma con la que actuaron.

A partir de ese día, en el edificio de Martina, Tomás, Sofía y Mateo, se organizaron simulacros de emergencia para que todos supieran cómo actuar en caso de necesidad.

Así, aprendieron que saber cómo actuar frente a una situación de emergencia es muy importante para mantenerse seguros y ayudar a los demás.