El Duende de la Libertad
Había una vez en un reino muy lejano, un rey malvado que oprimía a su pueblo. Los ciudadanos vivían con miedo y tristeza, ya que el rey era muy cruel y no les permitía disfrutar de sus vidas.
Un día, mientras los aldeanos trabajaban en sus campos, apareció un pequeño duende mágico. Era tan diminuto como una bellota y tenía unos ojos brillantes que desprendían luz propia. "Hola amiguitos", dijo el duende con alegría.
Los campesinos se sorprendieron al verlo y algunos incluso temieron por su presencia. "¿Quién eres tú?", preguntó uno de ellos. "Soy un duende mágico", respondió el pequeño ser. "He venido para ayudarlos".
Los campesinos no podían creer lo que estaban escuchando. ¿Cómo podría un ser tan pequeño ayudar contra la opresión del rey? El duende sonrió ante las dudas de los campesinos y comenzó a recitar hechizos mágicos.
Las nubes se abrieron y rayos de sol iluminaron el campo. De repente, la tierra comenzó a moverse y las plantas crecieron más altas y fuertes. Los campesinos se quedaron impresionados al ver cómo todo cobraba vida gracias a los hechizos del duende mágico.
"¿Puedes hacer algo para detener al malvado rey?", preguntó uno de ellos esperanzado. El duende cerró los ojos durante unos segundos antes de responder:"No puedo hacerlo solo, necesito su ayuda. Deben unirse y luchar juntos para vencer al rey malvado".
Los campesinos se miraron unos a otros y finalmente asintieron con determinación. "¡Lo haremos! ¡Lucharemos por nuestra libertad!", exclamó uno de ellos.
Con la ayuda del duende mágico, los campesinos comenzaron a organizarse y planearon una revuelta contra el rey opresor. A medida que pasaban los días, más personas se unían a su causa y pronto formaron un gran ejército. El día de la batalla llegó y todos estaban nerviosos pero decididos a ganar.
El duende mágico estaba en el centro del campo de batalla, recitando hechizos para proteger a sus aliados. En medio del caos, el rey malvado intentaba escapar pero fue capturado por los valientes campesinos.
Finalmente, después de años de opresión, el pueblo había logrado su libertad gracias al pequeño duende mágico. Desde ese día en adelante, todos vivieron felices y libres gracias a la valentía y magia del pequeño ser.
Los campesinos recordarían siempre cómo el poder de la unidad y la esperanza pueden vencer incluso al enemigo más poderoso.
FIN.