El elefante fotógrafo

En la selva vivía un elefante llamado Tronquito, quien tenía una pasión especial por capturar momentos mágicos a través de fotografías. Armado con su cámara y un gran sombrero, Tronquito recorría la selva en busca de las mejores instantáneas.

Un día, mientras paseaba por el bosque, se encontró con Lucas, un pequeño mono travieso y curioso. - ¡Hola, Tronquito! ¿Qué estás haciendo con esa cosa en tu cuello? - preguntó Lucas señalando la cámara.

- ¡Hola, Lucas! Estoy tomando fotos para documentar la vida en la selva y mostrar su belleza al mundo - respondió Tronquito con entusiasmo. - ¡Wow! ¿Puedo ver cómo funciona? - pidió Lucas emocionado. Tronquito le mostró cómo enfocar, encuadrar y capturar una imagen.

Lucas quedó maravillado. A partir de ese día, Tronquito y Lucas se convirtieron en grandes amigos. Juntos exploraban la selva en busca de los mejores paisajes y animales para fotografiar.

Un día, durante una expedición fotográfica, se toparon con Lila, una mariposa de colores brillantes. - ¡Hola, amigos! - saludó Lila con alegría. - ¡Hola, Lila! ¿Te gustaría que te tomemos una foto? - propuso Tronquito. Lila accedió emocionada y se posó en una rama cercana.

Tronquito logró capturar la esencia de la mariposa con sus coloridas alas desplegadas. La foto quedó espectacular. Lila les agradeció emocionada y les habló de un concurso de fotografía en la aldea de los animales. Tronquito y Lucas decidieron participar.

Trabajaron juntos para seleccionar sus mejores fotos y las prepararon para el concurso. Llegó el día del concurso y la aldea estaba llena de animales ansiosos por ver las fotos. El jurado anunció que el ganador del concurso era...

¡Tronquito! El elefante fotógrafo había capturado la esencia y la belleza de la selva en sus imágenes. Todos los animales aplaudieron y felicitaron a Tronquito.

Desde entonces, Tronquito siguió capturando momentos increíbles con su cámara, inspirando a todos los animales de la selva a apreciar la belleza que los rodeaba.