El emotivo adiós de la seño a sus peques graduados
Había llegado el momento de despedida para la seño Julia y sus queridos peques que se graduaban de jardín.
La seño estaba emocionada y con el corazón lleno de nostalgia, pero también de orgullo por el crecimiento y aprendizaje de sus alumnos. "Queridos peques, ha llegado el día en que nos tenemos que despedir. Estoy tan orgullosa de cada uno de ustedes, han crecido tanto y han aprendido tantas cosas.
Recuerdo cuando llegaron aquí por primera vez, algunos lloraban, otros no querían soltarse de mamá o papá, pero juntos superamos esos momentos y formamos un hermoso vínculo. Han aprendido a compartir, a respetarse, a escucharse, han explorado, jugado, reído y también llorado juntos.
Han sido parte de un hermoso proceso de aprendizaje, de descubrimiento y de amor. Y ahora están listos para seguir creciendo, para enfrentar nuevos desafíos en la primaria.
Siempre llevarán un pedacito de mi corazón y de este jardín con ustedes, y yo siempre llevaré un pedacito de cada uno de ustedes en mi corazón. Los voy a extrañar tanto, pero sé que van a brillar donde sea que vayan. Nunca duden de ustedes mismos, nunca dejen de aprender y de explorar.
Siempre recuerden que son capaces de lograr todo lo que se propongan. Los quiero mucho, mis queridos peques graduados." Los peques se abrazaron entre sí y a la seño, algunos con lágrimas en los ojos, otros con sonrisas llenas de emoción.
Fue un momento emotivo, pero también lleno de esperanza y felicidad por lo que vendría.
La seño Julia sabía que su legado perduraría en cada uno de sus peques, y que ellos seguirían creciendo y aprendiendo, llevando consigo todo lo que habían vivido en ese hermoso jardín.
FIN.