El encuentro en el bosque

Había una vez en un hermoso bosque, un pequeño y valiente conejo llamado Raigild. Un día, Raigild decidió explorar un camino diferente y se encontró con una misteriosa casa en medio del bosque.

Sin pensarlo dos veces, Raigild decidió entrar a la casa sin saber que pertenecía a una bruja. Mientras Raigild curioseaba por la casa, la bruja regresó de recolectar hierbas y se encontró con la sorpresa de ver al conejito dentro de su hogar.

- ¡Eh, tú! ¿Qué haces en mi casa? - exclamó la bruja con enojo. Asustado, Raigild salió corriendo lo más rápido que pudo, sintiendo el corazón golpeándole fuertemente en el pecho.

A pesar del miedo, Raigild recordó un consejo que su abuelita le dio: 'Enfrenta tus miedos y nunca dejes de creer en ti mismo'. Con valentía, Raigild continuó corriendo por el bosque, y logró escapar de la bruja.

Después de esta aventura, Raigild entendió que la curiosidad lo llevó a meterse en problemas, pero también aprendió que con valentía y determinación podía enfrentar cualquier desafío que se interpusiera en su camino.