El Equipo de Juan
Juan era un niño muy activo y le encantaba jugar al fútbol. Todos los días, después de la escuela, se juntaba con sus amigos en el parque para jugar a la pelota.
Un día, mientras jugaban, Juan notó que había un grupo de niños más pequeños observándolos desde lejos. Se acercó a ellos y les preguntó si querían jugar también. Los niños aceptaron entusiasmados y Juan decidió dividirlos en dos equipos para hacerlo justo.
Él se ofreció a ser el árbitro y comenzaron el partido. El juego fue muy divertido pero pronto Juan se dio cuenta de que uno de los niños más pequeños estaba teniendo dificultades para seguir el ritmo del partido.
Era evidente que no tenía mucha experiencia jugando al fútbol. Juan detuvo el partido y se acercó al niño. "¿Te gustaría que te enseñe algunos trucos?", le preguntó amablemente.
El niño asintió emocionado y Juan comenzó a darle consejos sobre cómo controlar mejor la pelota e incluso lo ayudó a marcar su primer gol en el partido. A medida que avanzaba el juego, todos los niños estaban aprendiendo nuevos trucos gracias a las enseñanzas de Juan.
Al final del día, todos los niños estaban agotados pero felices por haber pasado una tarde tan divertida juntos.
Mientras caminaba hacia su casa, sintiéndose orgulloso por haber ayudado a sus compañeros más jóvenes, una idea cruzó por la mente de Juan: ¿por qué no crear un equipo de fútbol infantil? Al día siguiente, reunió a sus amigos y les propuso la idea. Todos estuvieron de acuerdo y comenzaron a entrenar juntos para mejorar sus habilidades.
Con el tiempo, el equipo de fútbol infantil de Juan se convirtió en uno de los más populares del barrio. Los niños aprendieron mucho sobre trabajo en equipo, amistad y perseverancia gracias al deporte que tanto amaban.
Juan se dio cuenta de que su pasión por el fútbol no solo era divertida sino también educativa e inspiradora para otros niños. Desde entonces, decidió siempre compartir su amor por el deporte con aquellos que lo necesitaban.
FIN.