El gallo humilde y respetuoso
Había una vez en un hermoso campo de la Pampa Argentina, un gallo llamado Gallo Plumón. Era conocido por ser el gallo más presumido de todo el lugar.
Sus plumas brillaban bajo el sol y siempre lucía su pico en alto con orgullo. Un día, Gallo Plumón recibió una invitación muy especial: la boda de su amigo Pablo Bailón, un simpático pato que vivía al otro lado del río.
Gallo Plumón estaba emocionado por asistir a la boda y lucir sus plumas frente a todos los animales del campo. Decidió emprender el viaje hacia la boda, pero en el camino tropezó con un charco de barro y manchó sus preciosas plumas.
Estaba desesperado, no podía presentarse así en la boda de su amigo. Entonces, decidió pedir ayuda a los demás animales que encontraba en su camino.
Primero se topó con Conejo Saltarín y le dijo: "¡Conejo Saltarín, por favor ayúdame a limpiar mis plumas para ir a la boda de Pablo Bailón!". Conejo Saltarín lo miró y le respondió: "-Lo siento Gallo Plumón, no puedo ayudarte si sigues creyéndote mejor que todos nosotros.
" Gallo Plumón se sintió ofendido, pero siguió adelante y se encontró con Zorro Astuto. "-Zorro Astuto, necesito tu astucia para limpiar mis plumas antes de llegar a la boda", le suplicó Gallo Plumón.
Zorro Astuto lo miró con desconfianza y le dijo: "-Lo siento Gallo Plumón, no puedo ayudarte si no aprendes a respetar a los demás. "Desanimado, Gallo Plumón continuó su camino hasta toparse con Oveja Lanuda.
"-Oveja Lanuda, ¿podrías ayudarme a limpiar mis plumas para ir a la boda de Pablo Bailón?", le pidió con humildad. Oveja Lanuda lo miró tiernamente y le respondió: "-Por supuesto Gallo Plumón, te ayudaré porque has aprendido a respetar a los demás. "Oveja Lanuda compartió su agua cristalina y juntos limpiaron las plumas de Gallo Plumón.
Finalmente llegaron juntos a la boda de Pablo Bailón donde todos los animales los recibieron con alegría. Pablo Bailon abrazó a Gallo Plumón y le dijo: "-Gracias por venir amigo mío.
" Gallo Plumón comprendió que no era necesario ser el más presumido para ser querido por los demás. Aprendió que el respeto y la humildad son cualidades mucho más valiosas que el egoísmo y la vanidad.
Desde ese día en adelante, Gallo Plumón cambió su actitud hacia los demás animales del campo. Se convirtió en un verdadero amigo dispuesto siempre a tender una garra o una ala cuando alguien lo necesitaba.
Y colorín colorado este cuento ha terminado ¡Con valores como respeto e amistad hemos aprendido!
FIN.