El gato y el ratón

Había una vez un gato llamado Simón y un ratón llamado Lucas que vivían en una casa muy grande. Simón siempre trataba de atrapar a Lucas, pero éste siempre lograba escapar con su astucia y rapidez.

Un día, Simón se cansó de perseguir a Lucas y decidió proponerle un desafío. -Lucas, estoy cansado de perseguirte todo el tiempo. ¿Qué te parece si hacemos una competencia para ver quién es más inteligente y ágil? - propuso Simón.

-¡Me parece genial! Estoy seguro de poder ganarte en cualquier desafío que propongas -respondió Lucas con entusiasmo. Simón y Lucas acordaron que el primer desafío sería una carrera de obstáculos en el jardín.

El ganador tendría que ser el primero en llegar a la cima de un árbol y gritar ¡Soy el más astuto! La competencia fue muy reñida, pero finalmente fue Lucas quien logró superar todos los obstáculos y alcanzar la cima del árbol. -¡Lo logré! ¡Soy el más astuto! - gritó Lucas triunfante.

Simón, sorprendido y orgulloso, reconoció la astucia y la rapidez de Lucas. -Wow, Lucas, realmente eres muy astuto y ágil. Me has ganado justamente.

A partir de ese día, Simón y Lucas se convirtieron en buenos amigos y aprendieron a valorar las habilidades únicas de cada uno. Juntos vivieron muchas aventuras y se ayudaron mutuamente. A veces, la competencia puede convertirse en amistad.

Y así, el gato y el ratón demostraron que la verdadera astucia está en saber valorar y respetar las diferencias.