El gran cambio de Tito

Tito era un niño muy curioso y activo. Le encantaba explorar el bosque cercano a su casa y siempre se encontraba con diferentes animales.

Un día, mientras jugaba, se dio cuenta de que sus amigos animales eran muy diferentes entre sí. El conejo era rápido, el oso fuerte, la mariposa ágil y el pájaro cantaba hermosas canciones. Pero en lugar de sentir curiosidad y admiración por estas diferencias, Tito las veía como algo extraño y se burlaba de ellas.

- '¡Miren al conejo saltar tan rápido! ¡Es tan raro!' - se burlaba Tito. Sus amigos animales se sintieron tristes y decepcionados por su actitud. Entonces, decidieron pedirle ayuda a Sabio, el viejo búho del bosque.

Sabio escuchó atentamente sus preocupaciones y decidió enseñarle una lección a Tito. Le contó a Tito la historia de la diversidad en el bosque y le mostró lo maravilloso que era que cada animal tuviera habilidades únicas.

Tito, poco a poco, fue entendiendo la importancia de respetar y valorar las diferencias de sus amigos. Decidió disculparse con ellos y les pidió que le enseñaran más sobre sus habilidades especiales.

El conejo le enseñó a saltar, el oso a ser fuerte, la mariposa a ser ágil y el pájaro a apreciar la música. Tito se dio cuenta de cuánto podía aprender de sus amigos animales y cómo sus diferencias los hacían únicos y especiales.

Desde ese día, Tito valoró y respetó las diferencias de sus amigos animales, y juntos disfrutaron de grandes aventuras en el bosque, cada uno aportando su especial habilidad para el beneficio de todos.