El Gran Día en la Playa

Un cálido día de verano, mi familia y yo decidimos pasar el día en la playa. Empacamos nuestra lancha con todo lo necesario: protector solar, toallas, sillas de playa y por supuesto, mucha comida deliciosa.

Llegamos a la marina temprano por la mañana, listos para zarpar hacia un día de diversión y aventura. Cuando llegamos a la playa, nos encontramos con una sorpresa: ¡la marea había subido tanto que apenas quedaba arena para extender nuestras toallas! Pero eso no nos detuvo. Mi hermano y yo nos pusimos creativos y construimos un castillo de arena gigante en la parte seca de la playa.

"¡Miren qué genial nos quedó el castillo!" grité emocionado.

"Es espectacular, han hecho un gran trabajo", dijo papá, admirando nuestro castillo.

Después de un rato, decidimos aprovechar el día y nos aventuramos en la lancha hacia una pequeña isla cercana. Mientras navegábamos, vimos algunas especies de peces y aves marinas, lo cual nos emocionó mucho. Sin embargo, de repente, vimos a lo lejos una mancha de aceite en el agua.

"¡Papá, mira eso!", exclamé preocupado.

"Eso es muy triste, parece un derrame de petróleo. Debemos informar a las autoridades para que puedan limpiarlo lo más pronto posible", respondió papá seriamente.

Decidimos no acercarnos al área contaminada y en su lugar exploramos otras partes de la isla, recolectando basura que encontrábamos en la playa para ayudar a mantener el lugar limpio.

Al regresar a la playa, nos dimos cuenta de que la marea había bajado, revelando mucha más arena para disfrutar. Decidimos jugar un partido de vóley playa antes de preparar un delicioso picnic.

"¡Hoy fue un día increíble!", exclamé mientras nos sentábamos a comer.

"Así es, y aprendimos la importancia de cuidar nuestro entorno natural mientras nos divertimos", dijo mamá.

Esa noche, mientras navegábamos de vuelta a la marina, nos sentimos felices y orgullosos de haber vivido un día lleno de diversión, pero también de responsabilidad y conciencia ambiental.