El Gran Festival de los Alimentos

Había una vez en el Bosque de los Sabores, un lugar mágico donde los árboles daban frutas jugosas, las flores brillaban con colores vibrantes y los ríos tenían aguas frescas que hacían brillar el vientre de varios animales. Cada año, en el primer día de primavera, se celebraba el Gran Festival de los Alimentos, donde todos los habitantes del bosque venían a compartir y aprender sobre la importancia de los alimentos nutritivos.

Entre los preparativos del festival, estaban Rita, la ardilla, y Pablo, el pajarito. Rita estaba muy emocionada porque había decidido hacer la mejor ensalada de frutas que el bosque hubiera visto.

"¡Pablo! - exclamó Rita - ¿puedes ayudarme a recolectar las frutas para mi ensalada?"

"¡Claro! - respondió Pablo - ¡Me encanta la fruta! Pero, ¿cómo vas a hacer la ensalada?"

"Voy a usar fresas, kiwi, bananas y manzanas. Y les agregaré un poco de miel.”

Al oírlo, se acercó Nico, el sapo, que se pasaba la vida pensando en comida.

"¿Comida? ¡Me encanta la comida! ¿Puedo probar?"

"¡Claro, Nico! Pero primero necesito recolectar todas las frutas - contestó Rita - ¿Te animás a venir conmigo?"

"Por supuesto, vamos ya mismo!"

Ambos amigos comenzaron su aventura por el bosque. Mientras recolectaban, encontraban diferentes personajes que compartían sus conocimientos sobre los alimentos.

Primero se encontraron con Tina, la tortuga,

"Hola, amigos. Estoy recolectando hojas verdes para mi ensalada. ¿Saben cuán importantes son las verduras en nuestra dieta?"

"No, cuéntanos!" - dijo Pablo, curioso.

"Las verduras son llenas de vitaminas y minerales que nos ayudan a estar sanos y fuertes. ¡No olviden incluirlas en sus platos!"

Rita sonrió y prometió que haría una ensalada que tuviese también verduras.

Luego, se encontraron con Lalo, el ciervo, que estaba buscando bayas.

"¿Por qué te gustan las bayas, Lalo?"

"Son deliciosas y ricas en antioxidantes, lo que ayuda a que nuestros cuerpos se mantengan sanos. ¡Igual que el aire puro y el ejercicio!"

"¡Genial! - exclamó Rita - tendré en cuenta todo lo que estamos aprendiendo. ¡Esto hará que mi ensalada sea especial!"

Al seguir su recorrido, encontraron un árbol enorme donde se asoleaba Mica, la mariposa.

"Hola, amigos. ¿Qué andan haciendo?"

"Estamos recolectando frutas y verduras para la ensalada de Rita - dijo Pablo emocionado. - ¿Vos qué comes?"

"Flores, por supuesto. Ellas también son nutritivas. Tienen muchas propiedades que nos ayudan a crecer y a vivir en armonía con el mundo. ¡No olviden probar flores comestibles, son deliciosas!"

"¡Ya quiero que sea el festival! - dijo Rita - tendré una ensalada variada!"

"Y yo detalles sobre cada alimento que tengo para compartir – agregó Nico."

Después de un día repleto de aprendizaje y diversión, así como de muchas risas, regresaron a casa. Con todas las frutas y verduras recolectadas, Rita trabajó arduamente para preparar su famosa ensalada.

El día del festival, el Bosque de los Sabores brillaba como nunca. Todos los animales mostraban sus platos y compartían lo que habían aprendido. La gente estaba ansiosa por probar la ensalada de Rita.

"¡Mira! - gritó Pablo - ¡la ensalada de Rita es un arcoíris de sabores!"

"¡Y también es muy nutritiva! - dijo Lalo, mientras preparaba su plato - vamos a hacer que todos aprendan lo importante que es alimentarse bien, no solo para disfrutar, sino para estar saludables."

Cuando llegó la hora de presentar las ensaladas, Rita se sintió orgullosa.

"Gracias a todos los amigos que me enseñaron sobre la importancia de los alimentos - dijo mientras servía su ensalada - así apasionadamente me motivaron a hacer esta ensalada deliciosa y nutritiva. ¡Cada sabor cuenta!"

La comunidad se reunió alrededor y, mientras probaban la ensalada, todos se sintieron felices y satisfechos. El Gran Festival de los Alimentos había sido no solo una celebración, sino un verdadero aprendizaje sobre cómo la nutrición beneficia a todos los seres vivos.

Desde ese día, Rita, Pablo, Nico, Tina y Lalo se prometieron seguir explorando, aprendiendo y cuidando de su alimentación. El bosque se llenó de alegría, colores y, sobre todo, ¡mucha salud!