El Gran Juego del Bosque Encantado

Era un hermoso día en el bosque encantado. Diez amigos animales decidieron reunirse para jugar juntos. Estaban Lío, el conejo veloz, Carla, la tortuga pensativa, Tito, el pájaro cantor, y muchos más. Todos estaban emocionados por la gran aventura que les esperaba.

"¡Vamos a jugar a las escondidas!" dijo Lío brincando de alegría.

"Buena idea, pero yo soy muy lenta", respondió Carla con una sonrisa.

"No te preocupes, ¡todos podemos participar!", propuso Tito.

Así que, comenzaron el juego. Lío contaba del uno al diez mientras los demás se escondían. Cuando Lío terminó de contar, ¡empezó a buscar! Pero, mientras buscaba, se dio cuenta de que algunos de sus amigos se habían escondido muy bien.

"¡Aquí estoy!" gritó Rufi, el zorro, asomando su cola.

"¡Te encontré!" exclamó Lío, riendo.

"¡Pero no puedes encontrar a todos tan rápido!" dijo Susi, la ardilla.

Mientras todos jugaban, descubrieron que uno de los amigos, una pequeña luciérnaga llamada Lila, se había perdido.

"¡La tenemos que buscar!" dijo Carla preocupada.

Así que, se unieron y muy pronto encontraron a Lila debajo de una hoja grande.

"¡Gracias, amigos!" dijo Lila iluminarse de felicidad.

Y así, todos aprendieron que juntos podían ayudar a los demás y que la amistad era el mejor juego de todos. Al final, siguieron jugando y riendo, celebrando su valiosa unión en el mágico bosque.