El Gran Partido de Basquetbol



En un barrio tranquilo de Buenos Aires, vivía un niño llamado Martín, a quien le apasionaba jugar al basquetbol con sus amigos en la canchita del parque.

Martín era el más pequeño del grupo, pero eso no le impedía dar lo mejor de sí en cada partido. Un día, mientras se preparaban para un emocionante partido, Martín se tropezó y se torció el tobillo. Sus amigos se acercaron preocupados. -¡Martín, estás bien? -preguntó Juan.

-Sí, creo que solo me torcí un poco el tobillo, no se preocupen. Martín intentó levantarse, pero apenas pudo dar unos pasos. Sus amigos decidieron llevarlo a la casa de la abuela de Juan, Doña Rosa, quien era famosa por sus remedios caseros.

Doña Rosa les preparó una pomada de cúrcuma y romero, y les aseguró que Martín estaría recuperado en poco tiempo. Mientras tanto, sus amigos prometieron dedicar cada partido a Martín, jugando en su honor. Martín se sintió emocionado y agradecido.

Pasaron varios días, y Martín se recuperó completamente. El día de su regreso a la canchita, sus amigos organizaron un gran partido en su honor. Fue un encuentro emocionante, lleno de jugadas espectaculares y mucha diversión.

Al final del partido, Martín agradeció a sus amigos por su apoyo y amistad, y les prometió seguir esforzándose al máximo en cada partido. Desde ese día, Martín y sus amigos jugaron con más pasión y compañerismo que nunca, disfrutando cada momento en la canchita del parque.

FIN.

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